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Las veladoras están encendidas hacia la promesa del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de inyectarle 75 mil millones de pesos a Pemex para tareas de extracción.
El diagnóstico habla de una creciente importación de crudo de tipo ligero para alimentar la exigua producción de gasolinas en las refinerías existentes.
La posibilidad, pues, de construir una nueva en Dos Bocas, Tabasco, pasa necesariamente por un incremento sustancial en la producción de materia prima.
Como usted sabe, la crisis de 2015 en Petróleos Mexicanos provocó primero la disminución unilateral de la renta pactada por las plataformas que llegaron en la promesa de la multiplicación de los panes vía la reforma energética, que luego terminaron por cancelarse.
El recorte de la empresa productiva del Estado en su presupuesto de exploración fue de 62 mil millones de pesos.
El fenómeno dejó en el aire cuantiosas inversiones realizadas por nuevos y viejos jugadores en el ramo.
Así, por ejemplo, la Perforadora México de Germán Larrea Mota Velasco, quien llevaba 25 años en el negocio con su apuesta de cinco nuevas plataformas, o de grupo R de Ramiro Garza Cantú, quien a su vez había reforzado su infraestructura en espera de la gran piñata.
En el marco de jugadores con menos experiencia están la Perforadora Latina, de Adolfo del Valle; Perforadora Central, de Patricio Álvarez Morphy y Sea Dragon de David Martínez.
En la lista, con menos daño, están la operadora Cresa, Grupo Carso, del magnate Carlos Slim, y Tabasco Jackup.
Aunque su negocio apunta a plataformas de respaldo, no de perforación, el marco afectó también a la empresa Cotemar, con casi 40 años en el mercado.
El caso más dramático es el de la firma Oro Negro, que le apostó a la compra de seis plataformas vía la emisión de bonos de deuda, algunos de los cuales, bajo la denominación de Certificados de Capital de Desarrollo (CKD’s), se adquirieron con recursos de ahorradores en vía de retiro.
La firma está inmersa en un concurso mercantil… y un litigio contra Pemex, al que acusa, justo, de haber provocado su quiebra.
Aunque algunas de las firmas que adquirieron plataformas le apostaron a los astilleros de Singapur, otras fueron a China, donde se había creado una sobreoferta que hasta hoy mantiene varadas en sus costas a centenares de plataformas tipo jackup.
El costo unitario de éstas, dependiendo del país que las produce, oscila entre 120 y 180 millones de dólares.
Aunque no todos los propietarios de plataformas asistieron a la reunión convocada por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, en Dos Bocas, Tabasco, la promesa de multiplicar la producción despejó el incierto sobre la reforma energética y le quitó presión a la campaña para sustituir al nominado por éste para ocupar la dirección general de Pemex, aduciendo su falta de experiencia.
Las novenas se están rezando.
Balance general. La aprobación del Senado a la incorporación de México al convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo le abrió una coyuntura a la disidencia de sindicatos como el petrolero, el ferrocarrilero, el de telefonistas, para solicitar recuentos, es decir, votaciones libres para decidir si prevalece o cambia la dirigencia, o de plano el sindicato.
Sin embargo, la próxima secretaria de Energía, Rocío Nahle, ha dicho que no meterá las manos por ninguna fracción en pugna.
La parte más activa apunta al primero, dada la catarata de denuncias por enriquecimiento inexplicable contra el ex senador Carlos Romero Deschamps.
Sin embargo, en paralelo, la integración al último de los ocho puntos de justicia laboral de la OIT, obliga a las autoridades laborales a facilitar y dar certeza a los recuentos.
Como usted sabe, se quedó varada en el Senado una propuesta de reforma que le daría pauta a la desaparición de las juntas de conciliación y arbitraje, a quienes sustituirían juzgados laborales.
Revira Oceanografía. Rechazada por la Suprema Corte de Justicia la pretensión de los abogados de CitiBanamex de atraer el litigio que mantiene con Oceanografía por supuesto fraude con préstamos de factoraje por 450 millones de dólares, los signos indican que la contratista de Pemex va por la revancha.
Aunque aún subsisten acusaciones de corte penal contra el presidente de la empresa, Amado Yáñez Osuna, libre bajo fianza, sus abogados hablan de que saldría librado.
Como usted sabe, la matriz del banco llegó a un arreglo con la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos que le obligó a pagar una fuerte multa, frente a la acusación de falta de rigor en las operaciones relacionadas con la firma.
En el marco, se habla incluso de cuestiones políticas para arruinar a la empresa.
Ojo con OXXO. Utilizada la posibilidad de transferencias que ofrecen las tiendas de conveniencia OXXO, ésta está siendo utilizada por la delincuencia para materializar extorsiones, con la novedad de que los encargados de los negocios se niegan a proporcionar el nombre del usuario de la cuenta a la que se hizo el depósito.
Hace unos días, una pareja de ancianos fue víctima del ilícito, bajo la simulación de que el marido estaba secuestrado. La esposa pactó un “rescate” de 5 mil pesos que le pidieron hacerlo en cinco tantos de 990 con diferentes establecimientos de la cadena.
Levantada la denuncia correspondiente, el Ministerio Público solicitó acudir a los establecimientos a solicitar el dato, cuya respuesta fue una sonora carcajada.
IMSS sí, pero no. De acuerdo con una carta enviada al columnista, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pudo salir de su quiebra técnica al principio del sexenio, que le había obligado a consumir sus reservas y cancelar sus planes de crecimiento para mejorar sus servicios, vía un saneamiento financiero.
Según ello, éste implicó gastar mejor, nunca menos ni a costa de la calidad del servicio.
Al cierre de 2017, se aduce, el gasto en salud fue 24.8 mayor en términos reales a lo reportado en 2012.
Se habla de haberse surtido 37.4 millones de recetas más el año pasado que cuando inició el sexenio.
Sin embargo, los datos publicados en la columna (“IMSS, perfil de bancarrota”), muestran una caída dramática en el número de consultas, además de menos camas por cada mil afiliados y, desde luego, menos personal médico, datos que están totalmente comprobados.