Más Información
Sheinbaum supervisa avances de la Línea 4 del Tren Ligero en Guadalajara; “siempre será bienvenida a Jalisco”: Lemus
ONG obsequia implantes anticonceptivos a mujeres migrantes; buscan dar acceso a servicios de salud sexual
En los últimos años se comenzó a usar el llamado “ lenguaje incluyente ”, el cual consiste en cualquier tipo de expresión verbal o escrita que incluya explícitamente a hombres y mujeres, descartando el uso del masculino como genérico o mixto; además de esto, expresiones como “@”, “x” y “e” surgieron como intento de abarcar a ambos sexos en una misma palabra.
Expresiones como “ nosotres debemos tener acceso a los mismos derechos”, “todos los alumn@s deben asistir a la ceremonia de graduación” y “ todxs somos libres de tomar nuestras propias decisiones” son algunos ejemplos de cómo se utilizan estas variantes de la lengua.
Sin embargo, hay muchos puntos de vista al respecto porque mientras algunos lingüistas afirman que la lengua española no es sexista , otras personas aseguran que no nombrar a las mujeres y pretender que están incluidas al hablar con genérico masculino es una forma de invisibilizarlas .
Vicente Fox Quesada trajo al esquema político el desdoblamiento del lenguaje al hablarle a los “ciudadanos y ciudadanas” , esto con intención de expresar igualdad de género . Algunos consideraron esta expresión como una aberración por atacar uno de los pilares principales de la lengua: la economía.
La economía en el lenguaje es la característica que le permite al español crear una infinidad de palabras a partir de los sonidos de las letras, es decir, al combinar estos sonidos dan como resultado un sin fin de palabras que pertenecen a nuestra lengua.
En México, la Segob , en el marco de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres publicó el Manual para el uso del lenguaje incluyente y con perspectiva de género en el cual explica el porqué la lengua “no es sexista como sistema, sino que lo que es sexista es el mal uso que se hace de ella, uso consolidado, aceptado y promovido por la sociedad.”
Pilar Montes de Oca Sicilia , directora General de Algarabía , dijo en entrevista con El Universal que la apuesta por el lenguaje incluyente viene desde finales de la Segunda Guerra Mundial, cuando la mujer salió al campo laboral y decidió ser tomada en cuenta.
A continuación se muestran las principales posturas del porqué el lenguaje sí es o no excluyente.
Por qué el lenguaje no es sexista
Muchos lingüistas se oponen al uso del lenguaje incluyente porque, aunque están de acuerdo en que la lengua es un reflejo de la sociedad , niegan que ésta vaya a cambiar por la forma de expresarse. Opinan que es la sociedad la que debe modificarse para que posteriormente la lengua refleje dichos cambios.
Además de esto, el desdoblamiento del lenguaje a través del “todos y todas” representa una oposición a la facilidad y rapidez de comunicación que caracteriza a la lengua. Otro ejemplo que proporcionan lingüistas como Concepción Company , es que “hay lenguas como el mixteco que no tienen género en su lenguaje, no obstante, el machismo existe en esas comunidades”.
El género gramatical es independiente del género entendido como las características atribuidas por una sociedad determinada a hombres o mujeres. Por ese motivo decir “la silla” o “el pantalón” no significa que la primera sea mujer y el segundo hombre. En español el género gramatical existe para clasificar los sustantivos en femeninos, masculinos y neutros, comenta Pilar Montes.
El masculino es, en el español, el género empleado por default porque engloba tanto a hombres como a mujeres. Pilar considera que el lenguaje no debería ser incluyente, sino unisex ; es decir, que no se tomara en cuenta si se le habla a un hombre o a una mujer.
Por ese motivo considera que el lenguaje incluyente es una manera simple de querer resolver el problema de sexismo con decir “niños y niñas”, ella asegura que esto es un conflicto más complejo.
Por qué el lenguaje es sexista y discriminatorio
Por otro lado, quienes afirman que el lenguaje es excluyente argumentan que esta herramienta de comunicación es el reflejo de la sociedad que la emplea, de sus valores, creencias y costumbres. Por ese motivo, la lengua española sería sexista ya que es el espejo de ideologías machistas y misóginas que están arraigadas al subconsciente social.
Pilar Montes de Oca también declaró que sí existe sexismo en la lengua porque éste existe en la realidad y la lengua es un retrato de lo que sucede en la sociedad en un momento determinado. Este problema radica en frases sexistas como “calladita te ves más bonita” y el sexismo no se terminará con decir “muchachos y muchachas" .
Explicó que en muchas culturas a las mujeres se les caracteriza de cinco formas recurrentes: puta, inútil, histérica, bruja y tonta ; eso sí es sexista. Existe un inconsciente colectivo en donde se asume que las mujeres son las locas, histéricas, chismosas, “intensean”, son metiches y hablan mucho. Y ese no es un problema que tengan únicamente los hombres hacia las mujeres, sino que en numerosas ocasiones son las mismas mujeres quienes se refieren a sus iguales como “pinche vieja puta” o similares. “El lenguaje sexista no es uno machista de hombres denostando a las mujeres”, explica Pilar.
Esta postura también argumenta que el lenguaje cotidiano es una forma de violencia simbólica, es decir, una forma de agresión indirecta en la que el dominado no se percata de que está siendo agredido. Así, las mujeres se han acostumbrado a escuchar y leer todo en “masculino genérico”, sin notar que ellas no son nombradas y por lo tanto, invisibilizadas.
En ejemplos como “los héroes son valientes” y “que todos se registren” no se puede afirmar que se está dirigiendo a un grupo mixto, como diría la autora del Manual para el uso del lenguaje incluyente y con perspectiva de género, María Julia Pérez Cervera.