Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el planeta. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, al año, cobran la vida de 17.9 millones de personas, lo que representa alrededor del 32% de todas las defunciones a nivel global.
En nuestro país, las cifras no son menos alarmantes. Según resultados preliminares de 2023, dados a conocer por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las enfermedades del corazón ocuparon el primer lugar entre las principales causas de deceso (con un total de 189 mil 289 muertes), mientras que los eventos cerebrovasculares se ubicaron en la sexta posición (con un total de 34 mil 469 fallecimientos).
Con el fin de promover la salud cardiovascular de la población se creó la Coalición por el Corazón de México, una alianza que reúne a empresas, personas, instituciones tanto públicas como privadas, asociaciones, profesionales de la salud, universidades, entre otros actores, cuyo objetivo es desarrollar estrategias y programas que fomenten la prevención, el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado de estos padecimientos.
“El propósito de esta iniciativa es provocar un impacto en la sociedad, a través de la educación para prevenir las enfermedades cardiovasculares, de hacer conciencia entre las personas para llegar a una detección temprana y de mejorar la salud cardiovascular mediante la detección de pacientes con otras afecciones”, apunta Viviam Ubiarco, directora médica de Novartis México.
Unidos para tomar acción
Preservar la salud cardiovascular es posible gracias a la implementación de medidas encaminadas a promover hábitos saludables, además de motivar a la población a conocer sus niveles de colesterol, glucosa y presión arterial como una forma de prevenir el desarrollo futuro de algún trastorno del corazón, los vasos sanguíneos o las arterias.
La Coalición por el Corazón de México planea alcanzar estos objetivos a través de cuatro mesas de trabajo, que se enfocan en actividades específicas. “La primera es la conciencia social, ya que es clave que el público general entienda la importancia de reducir los factores de riesgo que pueden conducirlos a una enfermedad cardiovascular. También generamos datos que aporten información a la comunidad científica, política y aquella que toma decisiones en cuanto a los padecimientos cardiovasculares.
“Es fundamental, educar a los profesionales de la salud y público general sobre la relevancia de disminuir los eventos cardiovasculares mediante la reducción de factores de riesgo. La cuarta mesa se enfoca en la política pública, con el fin de implementar programas de gobierno para aminorar los eventos cardiovasculares de forma más masiva, además de buscar trabajar en colaboración con las cámaras para generar una ley general de salud para estas enfermedades”, señala la directora médica de Novartis México.
Dichas mesas de trabajo tienen como meta promover tanto la educación como la concientización de la salud cardiovascular en la población mexicana. De igual manera, se busca establecer alianzas con empresas de consumo para fomentar estilos de vida saludables y adoptar hábitos que contribuyan a la prevención de estas afecciones.
También se busca impulsar la investigación científica y el desarrollo de nuevas tecnologías en el ámbito cardiovascular, así como potenciar la formación y capacitación de los profesionales de la salud en esta área. La suma de estos esfuerzos puede marcar la diferencia para reducir las muertes por enfermedades del corazón que tanto aquejan a la población mexicana, además de mejorar su calidad de vida.
La prevención es la clave
Las enfermedades cardiovasculares agrupan diferentes trastornos del corazón y los vasos sanguíneos, tales como cardiopatía coronaria, eventos cerebrovasculares, cardiopatías congénitas, trombosis venudas profundas y embolias pulmonares, mismos que son potencialmente letales si no se tratan de manera oportuna y adecuada.
“El infarto agudo al miocardio, o ataque cardiaco como también se le conoce, es la primera causa de muerte. Se trata de una obstrucción en alguna arteria del corazón, la cual causa que no llegue sangre al músculo de este órgano y se tenga un problema que puede ser mortal hasta en el 50% de quienes lo presentan. También son frecuentes la insuficiencia cardiaca y las enfermedades de las válvulas”, menciona Luisa Fernanda Aguilera, presidenta de la asociación Salvando Latidos.
A pesar de lo alarmante de las cifras, este tipo de padecimientos son prevenibles mediante el control de los principales factores de riesgo, como son la hipertensión arterial, la diabetes, la obesidad, el sobrepeso, el tabaquismo, el colesterol elevado, la inactividad física, además de otros como el alcoholismo y el estrés excesivo.
Es por ello que empresas, personas, instituciones tanto públicas como privadas, asociaciones, profesionales de la salud, sociedades científicas, universidades, entre otras, decidieron unirse para cambiar el panorama de las enfermedades cardiovasculares en nuestro país a través de la Coalición por el Corazón de México.
“Cuando los niveles de colesterol están elevados durante mucho tiempo, la persona aumenta su factor de riesgo de muerte cardiovascular, de ahí la importancia de disminuir el colesterol LDL. En los pacientes con diabetes mellitus, un control adecuado de la glucosa reduce la probabilidad de eventos cardiovasculares.
“Resulta clave mantener bajo vigilancia otras enfermedades que pueden causar un evento de este tipo, como la hipertensión, la obesidad, la insuficiencia cardiaca y la enfermedad renal crónica. También se deben supervisar los factores dietéticos, dejar de fumar, no consumir bebidas alcohólicas y promover el ejercicio”, aconseja la especialista Viviam Ubiarco.
Impactos que no se ven
Vivir con una enfermedad cardiovascular puede mermar de manera significativa la calidad de vida de los pacientes no solo en el plano de la salud física, sino también producir un impacto considerable a nivel emocional, social, laboral y económico.
“Cuando alguien presenta ya muchos síntomas, se puede dificultar su capacidad para realizar diferentes actividades, así como tener problemas para respirar. Además, pueden manifestar dolor de pecho cuando hacen esfuerzo o sufrir desmayos, palpitaciones o confusión”, explica la cardióloga clínica Luisa Fernanda Aguilera.
Las enfermedades cardiovasculares llevan a una disminución de la productividad laboral, ya que los pacientes suelen requerir tiempo fuera del trabajo para recibir tratamiento o recuperarse de algún procedimiento médico. Por si fuera poco, también puede verse afectada su concentración debido a su condición de salud.
Se estima que el costo aproximado de este tipo de padecimientos es de más de seis mil 100 millones de dólares al año en nuestro país, debido a los costos asociados con la pérdida de productividad laboral y el tratamiento médico. Y es que los gastos en atención y medicamentos pueden ser muy altos, lo que afecta tanto a los presupuestos familiares como del gobierno.
“Es por ello que la prevención de las enfermedades cardiovasculares es fundamental. Si empezamos a educar a los niños a llevar una alimentación correcta, el sobrepeso irá disminuyendo con el tiempo. Se debe fomentar, asimismo, la educación sobre la actividad física no como un estándar de belleza, sino como aquello que hace que nuestro corazón desarrolle los músculos de forma adecuada y esto permita una correcta función a lo largo de la vida.
“Alcanzar a toda la población requiere de la alianza de personas, empresas, academias e instituciones que deseen sumarse a la Coalición por el Corazón de México. Además de sensibilizar a la población general sobre las enfermedades cardiovasculares, esta iniciativa tiene como propósito impulsar la salud cardiovascular y mejorar la calidad de vida tanto de los pacientes como de la población mexicana”, subraya la directora médica de Novartis México.
Cuida tu corazón
- Lleva una dieta alta en verduras y frutas.
- Reduce la ingesta de sal y grasas trans.
- Evita fumar y consumir alcohol.
- Practica actividad física al menos 150 minutos a la semana.
- Acude a revisiones médicas por lo menos dos veces al año.
Fuente: Secretaría de Salud