El Premio Nacional de Ciencias y Artes 1986 y miembro de El Colegio Nacional desde 1985, Adolfo Martínez Palomo , es categórico al señalar que “en la actualidad hay un problema de ignorancia, de soberbia y de desprecio por parte del gobierno a la ciencia. La ignorancia es muy grande porque no saben para qué nos ha servido y para qué nos servirá en el futuro”.
El profesor emérito del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav), doctor por la UNAM, maestro en Ciencias de la Universidad Queen’s, en Canadá, y antes investigador asociado en el Instituto de Investigaciones sobre el Cáncer, en Villejuif, Francia, tiene esta apreciación derivada de la insuficiencia de recursos para la ciencia y la tecnología en México y, a últimas fechas, por los recortes al presupuesto.
“Muchas de las gentes que están decidiendo qué se hace con la ciencia en nuestro país, no saben y hablan de una ciencia nacionalista; pues todo esto ha sido nacionalista durante 50, 60 años, no necesitamos inventar una ciencia diferente”, afirma el miembro de organizaciones internacionales dedicadas a la promoción de la investigación en salud, como el Comité de Expertos en Enfermedades Parasitarias de la OMS, el Consejo Directivo del Instituto Internacional de Vacunas dependiente de la ONU y del Comité Global de Investigación en Salud, con sede en Ginebra.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el médico parasitólogo y académico mexicano (Ciudad de México, 1941) asegura que los políticos suelen ser soberbios e ignorantes.
También lee: "Álvarez-Buylla está heredando un Conacyt autoritario"
“Los políticos son soberbios e ignorantes, no quiero hablar de ninguna persona en particular, lo que nosotros sentimos como médicos, como científicos, es la ignorancia, en primer lugar, y después todo esto que es resultado de su soberbia y de su desprecio”, dice el científico que ha estudiado la biología de las células neoplásicas del sistema de conducción del corazón y de la interacción huésped-parásito en la amibiasis, la giardiasis y la oncocercosis.
¿Ignoran lo que ha aportado la ciencia?
Les voy a decir para qué nos ha servido la ciencia: para mejorar la salud en México. Les interesan mucho los pobres, pues muchos pobres en Oaxaca y en Chiapas tenían el futuro condenado a la ceguera por la oncocercosis y eso ya se eliminó, y se eliminó utilizando las herramientas de la ciencia. Gracias a la ciencia se ha logrado salvar la vida de millones y millones de niños con la rehidratación oral y eso ya se nos olvidó; eso es pura ciencia aplicada, pura ciencia de fisiología, empezó incluso con estudios de transporte de agua en la piel de la rana, imagínese, a partir de esos estudios se llegó a saber por qué la rehidratación oral podría ser tan importante para salvar vidas. A través de la ciencia se han evitado muertes de paludismo en México, hace 50 años era una de las principales causas de muerte y hoy ya no hay paludismo, eso es por la ciencia aplicada a la salud pública. Entonces los niños mexicanos tienen una vida mejor porque tienden a realizarse la rehidratación oral; la gente que trabaja en los sitios donde se recoge café en Chiapas y en Oaxaca ya no tiene ese lastre de tener que terminar ciegos; ya los niños mexicanos no mueren de paludismo; se ha logrado relativamente controlar el sida, cuando era un problema extraordinariamente complejo y no se sabía ni siquiera qué es lo que lo producía... todo esto lo ha traído la ciencia. ¿Sabe qué descubrimiento ha hecho la ciencia mexicana al mundo?, la píldora anticonceptiva, y eso lo hizo la industria farmacéutica, los químicos de las universidades y los médicos de los institutos de salud; fue la liberación de la mujer ni más ni menos. Fue una contribución a la ciencia mundial, ha sido muy importante para modificar las características sociológicas de las mujeres. Y todo eso no se sabe.
El Presidente ha hablado de “los científicos del Porfiriato”, ¿es así?
Era una filosofía y no una ciencia. Había unos cuantos aficionados a la ciencia. Y lo sé por la edad que tengo, mis generaciones fueron las primeras que pudieron trabajar en ciencia profesionalmente, porque antes no había científicos que se pudieran ganar la vida tratando de hacer ciencia. Yo he visto a lo largo de estas décadas cómo hemos tenido una gran indiferencia hacia la ciencia, pero nunca lo que estamos viendo ahora, un desconocimiento absoluto y una visión hacia atrás, es una visión de mediados del siglo pasado que este pobre país no va a poder resistir.
El Presidente dijo que los investigadores no están exentos de cometer corrupción, ¿los investigadores son corruptos?
También lee: Aun con recortes, seguiremos trabajando: científico del Cinvestav
¡Como gremio, en lo absoluto! ¡Nos confunden con los políticos!
La directora de Conacyt achacó a la “ciencia neoliberal” el atraso ante el Covid-19
Eso es absurdo y es parte de todos los adjetivos que comenté y que puedo adjudicar a las autoridades; no quiero personalizar a nadie, no tiene ningún caso, pero desde luego que es absolutamente ridículo esto. Por eso ayudaría poder divulgar qué ha hecho la ciencia por este país, porque son tantos ejemplos y nadie lo sabe, ni siquiera los médicos ni los expertos, no tienen una idea clara, pues se debe tener una visión casi de historia reciente.
¿No hay presupuesto y no hay reconocimiento?
Eso es lo que me preocupa y me tiene muy triste, no solamente es cuestión de presupuesto, es algo más, es una actitud de las autoridades, de desprecio hacia la ciencia, de desprecio a los científicos como está ocurriendo ahora, de desprecio a los médicos cuando lo que se requiere es una mayor exaltación de la labor de los médicos que están muriendo, pero es cuando se tiene el atrevimiento de burlarse del mercantilismo de los médicos. No cuesta dinero dar el verdadero valor a ciertas posiciones, como los científicos y los médicos, y en eso estamos y es realmente muy lamentable.
Imagínese un muchacho que hace esfuerzos verdaderamente extraordinarios para estudiar ciencia, con unas becas relativamente pequeñas subsistir durante varios años y ver que sus autoridades están despreciando su actividad y la que han hecho sus maestros, ¿para dónde vamos?, eso no cuesta dinero, pero es muy fácil echarlo para atrás.
También lee: "Conacyt quiere ser la voz, no quiere que haya otras voces"
¿Los recortes pueden ser letales?
Se está frenando el presente, la investigación que estamos haciendo, pero más que eso, se está ahogando, se está asfixiando el futuro que son los estudiantes y eso es extremadamente grave; por ejemplo, en el Cinvestav tenemos más de 3 mil estudiantes de maestría y de doctorado; después de la UNAM es la institución más importante formadora de científicos en el país, y una reducción significativa de un presupuesto ya de por sí muy exiguo, muy pequeño, significaría un retraso inadmisible para los estudiantes que, de entrada, tienen un periodo definido para terminar su maestría o doctorado. Los recortes impactan en los retrasos inadmisibles de estos estudiantes cuando lo que requiere el país es conocimiento, lo que requieren son investigadores jóvenes. Están matando literalmente el futuro del país. Esperamos que se tome esto en cuenta, pero igual está pasando en otras áreas como la cultura y la salud, también la situación es extraordinariamente difícil.
¿Se puede acabar con la ciencia futura?
Para los estudiantes es muy difícil terminar una maestría, terminar un doctorado y si se recorta el presupuesto se quedan sin beca y sin trabajo, ¿porque dónde van a encontrar trabajo ahora que ya tenemos el problema económico grande?, se está filtrando un futuro inmediato muy complicado. Sin embargo, le tengo confianza a los jóvenes, ellos no se van a dejar, ellos no se van a declarar derrotados, eso es seguro, no sé cómo ni cuándo; lo que podamos hacer nosotros que estamos en la trinchera desde hace mucho rato lo haremos, pero los jóvenes no van a dejar que este país se vaya para atrás. Porque si no tuviéramos una esperanza, qué nos quedaba. Esa es la gran ventaja de poder trabajar con jóvenes, que uno se da cuenta que ahí está el futuro, nada más que no lo acaben y no les quiten los presupuestos y las becas.