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maria.saldana@eluniversal.com.mx
Concretar un acuerdo para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) de aquí a agosto, como lo planteó el gobierno estadounidense, dependerá de la voluntad política que haya, coincidieron los líderes de la Coparmex, CCE y del Cuarto de Junto.
El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos; del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón, así como el coordinador del Cuarto de Junto, Moisés Kalach, coincidieron en que la reunión bilateral entre México y Estados Unidos que se desarrolla desde ayer y hasta hoy no necesariamente significa que de inmediato habrá un cierre de la negociación del TLCAN.
Solamente, es una señal de que existe interés de los socios por avanzar, pero falta que se demuestre que si hay voluntad, dijeron.
De acuerdo con Castañón, la posibilidad de lograr acuerdos será consecuencia de la voluntad de Estados Unidos de flexibilizar sus peticiones para encontrar un acuerdo en principio.
“Si existe una posibilidad y voluntad de cerrar (la negociación), será en las próximas semanas”, consideró el líder del CCE.
El presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, consideró que “es una nueva oportunidad para avanzar. Pero, veo difícil que de inmediato se pueda dar un cierre”.
El líder del sindicato patronal expuso que “es difícil poder estimar la posibilidad de éxito de esto, pero es buena señal que el equipo negociador de México esté acompañado de representantes del próximo gobierno. Estamos optimistas”.
El coordinador del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales del CCE, Moisés Kalach, explicó que si bien el representante comercial Robert Lighthizer dijo que esperan concluir las negociaciones del TLCAN en agosto, esa decisión se tiene que trasladar a las mesas de negociaciones.
“Las señales que vemos son buenas, diría que es tema de voluntad”, agregó el empresario.
“No puedo decir que automáticamente se llegará a un acuerdo. El momento se acerca y la voluntad está ahí, los actores ven necesidad y hay interés político”, dijo.
Además, el empresario textilero mencionó que “se esperó que pasara la elección en México, se dio espacio a ver reacciones de la transición. Y en noviembre va a haber elecciones para el Congreso estadounidense y eso pone presión a Estados Unidos, que tiene muchos frentes de batalla abiertos. El TLCAN puede ser parte de la solución positiva”.
Kalach expuso que seguramente en la reunión entre Guajardo, Videgaray y Lighthizer se trataron los “temas tóxicos”, así como el avance de capítulos de menor complejidad.
Se sabe que la visita que realizan los secretarios mexicanos de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray y de Economía, Ildefonso Guajardo, a Washington tiene como uno de sus objetivos definir cuándo y cómo retomar la renegociación del acuerdo comercial.
Según lo dicho por el jefe negociador técnico del TLCAN, Kenneth Smith Ramos, “de lo que se trata es retomar la conversación con Estados Unidos. De definir cuándo se reúnen los grupos técnicos a nivel trilateral, y próximamente tendrá que haber un encuentro a nivel trilateral”.
Si bien se dará ese encuentro bilateral México-Estados Unidos entre ayer y hoy, determinar si avanzará la negociación es difícil, coinciden los representantes de organismos del sector privado.
