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Las máximas autoridades del Consejo de Administración de Pemex y de la petrolera habrían pedido la renuncia de los consejeros profesionales, para que puedan aprobarse “sin ningún tipo de problema u oposición” las políticas públicas en materia de hidrocarburos y la nueva estructura de la empresa, como la construcción de la nueva refinería de Dos Bocas, Tabasco, la rehabilitación del Sistema Nacional de Refinación, el abandono de la explotación de recursos no convencionales —aceite y gas Shale— y retrasar las futuras rondas de licitación de campos petroleros.
Fuentes del sector allegadas a Pemex explicaron que de confirmarse la renuncia “se abre la puerta al nombramiento de consejeros a modo y se cierra el espacio de los contrapesos en el máximo órgano de gobierno de la petrolera”.
El Artículo 13 de la Ley de Pemex señala que “El Consejo de Administración, órgano supremo de administración de Petróleos Mexicanos, será responsable de definir las políticas, lineamientos y visión estratégica de Petróleos Mexicanos, sus empresas productivas subsidiarias y sus empresas filiales”.
Explica además, en el Artículo 15, que dentro de la estructura del consejo hay cinco consejeros independientes, designados por el Ejecutivo y ratificados por el Senado, quienes ejercerán sus funciones de tiempo parcial y no tendrán el carácter de servidores públicos, los cuales deberán “apoyar al Consejo de Administración a través de opiniones, recomendaciones y orientaciones que se deriven del análisis del desempeño de Petróleos Mexicanos”.
Actualmente, en el Consejo de Administración de Pemex la figura de consejeros independientes —cinco lugares— son ocupados por Octavio Francisco Pastrana Pastrana, Carlos Elizondo Mayer-Sierra y María Teresa Fernández Labardini. Dos lugares están vacantes.
Las fuentes consultadas explicaron que los cambios pueden darse, “pero quienes lleguen deben reunir el perfil necesario y deben tener la responsabilidad de velar por los intereses de la empresa y del país, ser verdaderos contrapesos”.
Los cambios, agregaron, pudieran ser otro problema que las calificadoras “seguramente van a analizar, porque de los nuevos consejeros depende la aprobación o rechazo del Plan de Negocios de la empresa y sus futuras implicaciones en la industria”.
De acuerdo con el diario The Wall Street Journal, tres miembros independientes del Consejo de Administración de Pemex “están dispuestos a renunciar por un desacuerdo con la estrategia del presidente Andrés Manuel López Obrador para administrar la petrolera”, de acuerdo con fuentes citadas por el rotativo estadounidense.
Estas renuncias podrían dar a López Obrador un mayor control sobre Pemex mientras busca apuntalar el papel dominante de la empresa.
Sin embargo, hasta ahora y desde la incorporación de la figura de consejeros —primero profesional y ahora independiente, 2009— sólo tres de los asesores manifestaron abiertamente su oposición a decisiones tomadas a nivel del máximo órgano de gobierno de la empresa productiva del Estado:
En 2010, Fluvio Ruíz Alarcón y Rogelio Gasca Neri presentaron votos razonados sobre el Programa de Reestructuración de la petrolera y de los contratos incentivados.
En 2011, fueron Héctor Moreira y nuevamente Rogelio Gasca Neri; en 2014, se presentó un voto particular de Fluvio Ruíz Alarcón.
