El director del Departamento de Finanzas Públicas del Fondo Monetario Internacional (FMI), Vitor Gaspar, urgió a los secretarios de Hacienda del mundo a concentrarse en mejorar la parte fiscal de sus países ante los cambios en el contexto internacional que están generando incertidumbre.
“Deben actuar de manera urgente y decisiva porque se enfrentan a dilemas complicados, deben invertir su capital político en desarrollar la confianza, eso empieza por mantener su propia casa en orden”, dijo en conferencia de prensa.
Al presentar el reporte Monitor Fiscal con las actualizaciones a abril del 2025, enfatizó que lo anterior es importante porque la resiliencia se está poniendo a prueba en algunos países.
Hizo ver que la deuda mundial se encuentran en niveles pre pandemia, pero de cara al futuro, alertó, está “plana la curva”, lo que indica que seguirá subiendo hasta acercarse al 100% del Producto Interno Bruto (PIB) a finales de la década.
Esto cobra relevancia en la coyuntura actual con el factor incertidumbre en niveles poco habituales, ponderó, ante los riesgos para la deuda pública que están dominando las perspectivas.
Mencionó que de acuerdo a la herramienta que lanzó el Fondo Monetario en 2024 para monitorear la deuda mundial, en un plazo de tres años llegará a 117% del PIB en un escenario muy adverso, nivel no visto en varias décadas en el que se podrían estar subestimando los riesgos de “cola” por el comercio internacional, las tensiones geopolíticas y condiciones financieras restrictivas.

FMI propone medidas para reducir los riesgos fiscales
Para organizar la casa propia consideró seguir los siguientes pasos: primero, que la política fiscal debe ser parte de políticas macroeconómicas orientadas a la austeridad.
En segundo lugar, reducir la deuda pública y reconstituir las reservas para crear el espacio fiscal para responder a las presiones de gasto y otros shocks económicos por medio de marcos creíbles a mediano plazo.
Tercero, con reformas orientarse a mejorar el crecimiento.
Sin embargo, ponderó que en estos tiempos, la confianza y estabilidad deben contribuir a la competitividad de las economías y al crecimiento y prosperidad.
“Los ministros de finanzas deben desarrollar la confianza, poner impuestos de manera justa, gastar con juicio y adoptar una perspectiva de largo plazo”, indicó.
Por su parte, la subdirectora del departamento de Fianzas Públicas, Era Dabla-Norris, estimó que con incertidumbre y en una escalada comercial puede aumentar la deuda en los mercados emergentes 6 puntos, con lo cual crece su costo y pone en riesgo el gasto social y en infraestructura en un marco de rigidez del presupuesto por compromisos contraídos en pensiones y otras presiones nuevas con el cambio climático.
De ahí que hizo un llamado a implementar la consolidación fiscal en las economías que lo requieran.
En tanto, el economista del área, Davide Furceri dijo que podrían empezar con buscar fuentes estables de ingresos a través de la ampliación de la base tributaria y eliminar exenciones y esquemas fiscales preferenciales.
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