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La amenaza arancelaria por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump ya impactó a la economía mexicana y es probable que se encuentre en recesión técnica, de acuerdo con el banco suizo UBS.
En dicho entorno, la firma financiera redujo su proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de nuestro país de 1% a cero para 2025.
“El daño ya está parcialmente hecho, y es muy probable que la economía ya se encuentre en una recesión técnica. Ahora esperamos un crecimiento de cero en México este año. Si se materializan los aranceles, tendremos que reducir aún más el crecimiento”, dijo UBS.
En el reporte, “México en la era de los aranceles intermitentes”, el banco explicó que después de un viaje a nuestro país en el cual se reunió con funcionarios públicos, consultores económicos y políticos, agencias de calificación e inversionistas locales, si bien en el consenso hay preocupación por las amenazas arancelarias de Trump, se tiene la percepción general de que la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum está gestionando la situación eficazmente y que los aranceles, de imponerse, probablemente serían de corta duración debido al impacto económico y financiero en Estados Unidos.
Explicó que dicho entorno, deja al Banco de México con mayor margen para recortar las tasas de interés, donde su previsión es pasar de 8% a 7.50% al finalizar el año.
Con ello está anticipando que continúe con los recortes y lleve la tasa de referencia a un nivel terminal de 7.50% en 2025.
Bajo ese escenario, estimó que el impacto en el tipo de cambio será de una mayor presión sobre el peso al superar las 21 unidades para finales de año.
“En cuanto a la estrategia, los argumentos para recibir tasas locales se mantienen sólidos (tenemos posiciones largas en tasas a 5 años) a pesar del repunte del primer trimestre, y México ofrece hoy el contexto más favorable para este tipo de operaciones en la región. En cuanto al mercado cambiario, creemos que la presión sobre el peso se intensificará a medida que se intensifiquen los recortes de Banxico y se desaceleren las economías de Estados Unidos y México”, dijo.
Para UBS, es improbable que México tome represalias a gran escala si se imponen aranceles. Si bien el primer ministro canadiense, Trudeau, reaccionó con el anuncio inmediato de aranceles de represalia tras la introducción inicial de un arancel estadounidense del 25% tanto para México como para Canadá el 1 de febrero, la presidenta Sheinbaum ha adoptado una estrategia más moderada al no tomar represalias, lo que hasta ahora ha ayudado a tender puentes con la administración Trump.
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“La administración Sheinbaum está siguiendo una táctica similar con respecto a la reciente imposición de aranceles estadounidenses al acero y al aluminio, a los que Canadá y la UE ya han tomado represalias. Si Estados Unidos finalmente impone un arancel generalizado a todos los productos mexicanos, cabría esperar que la represalia mexicana fuera de alcance limitado y de naturaleza quirúrgica, al menos en primera instancia”, dijo.
En ese sentido, descartó que México se involucraría con Estados Unidos de forma recíproca, sino que podría aplicar aranceles específicos a productos que podrían ayudar a persuadir a los votantes y legisladores republicanos estadounidenses contra los aranceles de Trump.
“Los granos, los productos porcinos y los licores podrían entrar en esta categoría. México podría no ser el candidato más adecuado para aranceles recíprocos”, dijo.
Al hacer referencia al alto índice de aprobación del que goza la mandataria mexicana, refirió que al principio de su administración se adhirió muy de cerca a las directrices políticas de AMLO.
“Sheinbaum está trazando su propio rumbo en una serie de áreas e iniciativas importantes, como: seguridad, donde ha habido un abandono implícito de AMLO”, aseguró.
desa/mgm
