El peso mexicano en los mercados internacionales terminó agosto en 17.01 unidades por dólar, una depreciación de 1.70% o 28 centavos contra el cierre de julio, de acuerdo con datos de Bloomberg, y con ello rompió una racha de siete meses seguidos de ganancias.
El tropezón del peso de este jueves también tuvo que ver con que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Banco de México (Banxico) dieron a conocer que a partir de hoy dejarán de inyectar dólares de manera gradual en el mercado cambiario vía subastas de coberturas ofrecidas a instituciones de crédito.
Así lo informó la Comisión de Cambios, que preside la SHCP y en la que participa Banxico, a la par que ratificó que el valor de la moneda nacional se determina bajo un régimen de libre flotación en los mercados cambiarios.
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La medida fue interpretada por algunos analistas consultados por EL UNIVERSAL como una intervención del mercado cambiario a fin de corregir al superpeso.
Para otros, podría significar un mecanismo para comenzar a acumular reservas internacionales y estar listos para el momento en que el Fondo Monetario Internacional (FMI) disminuya el monto de la Línea de Crédito Flexible (LCF) por 47 mil millones de dólares que otorgó a México, misma que en noviembre próximo se va a renovar y que sirve como escudo para enfrentar una salida abrupta de capitales.
Efecto inmediato
Después del anuncio de la Comisión de Cambios, el tipo de cambio mostró una depreciación de 37 centavos o 2.19%, destacó la directora de análisis económico y financiero de Banco Base, Gabriela Siller.
Para el subdirector de Análisis Económico de Vector, Luis Adrián Muñiz, se espera que la reacción no sea una tendencia, que sería natural después de lo que se dio a conocer, por lo que descartó que genere presiones en la inflación.
Sin embargo, el subdirector de análisis de Valmex, Víctor Ceja, recordó que cuando iniciaron esas subastas en 2017 el tipo de cambio estaba muy depreciado, en 20.45 pesos por dólar, lo mismo en marzo de 2020, por la pandemia, por arriba de 25 pesos por unidad.
En ese entonces, refirió, se inyectaron dólares al mercado, aumentando la oferta, lo que ocasionó la fortaleza de la moneda nacional, ya que había mucha preocupación por la fuerte depreciación y se realizó exitosamente la intervención a través de las subastas.
Ahora, apuntó Ceja, es una situación a la inversa, pues el tipo de cambio está sumamente fuerte y la inyección de dólares ya no es necesaria, puesto que los fundamentos de México son sólidos y hay dólares que llegan de remesas, turismo y de la balanza comercial no petrolera.
Aseguró que con la reacción del tipo de cambio habrá beneficiados, ya que ayudará a las finanzas públicas vía ingresos petroleros, al consumo a través de las remesas y al propio Banxico, que está perdiendo en las subastas cambiarias por el pago de coberturas con un tipo de cambio más fuerte.
“Tiene un efecto positivo en esa dirección, por eso fue una decisión acertada”, afirmó.
Ojo a las reservas
El economista en jefe para América Latina de Barclays, Gabriel Casillas, dijo que, con el anuncio, la Comisión de Cambios desea instrumentar un programa para elevar el nivel de las reservas internacionales para reemplazar a la línea de crédito del FMI y continuar con buenas métricas en reservas en el ámbito internacional.
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“Esto no quiere decir que la Comisión de Cambios no esté de acuerdo con un peso fuerte; estamos seguros de que apoyan totalmente un régimen de tipo de cambio flexible”, afirmó.
Para Ernesto O’Farril, presidente de Bursamétrica, el anuncio de la Comisión de Cambios responde a la menor demanda de cobertura cambiaria que existe a pesar de que el mercado está más abajo.
Su expectativa es que al cierre del año el precio del dólar al mayoreo se ubique entre 17.50 a 18 pesos, debido a que prevé que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) haga un incremento adicional de un cuarto de punto en su tasa de referencia en noviembre.
En su opinión, para 2024 existe la expectativa de mayor volatilidad tanto por una posible desaceleración de la actividad económica, como por la agitación política que pudiera registrarse en México y en Estados Unidos.
“Esto podría llevar al tipo de cambio arriba de 20 pesos a mediados del próximo año, y posteriormente, hacia finales de 2024 regresar a 18 unidades”, estimó.
Fuerte en 2023
Pese al tropezón de ayer, la moneda nacional mantiene una apreciación de 12.6% o 2.46 pesos frente a la divisa estadounidense en lo que va del año, superada únicamente por el peso colombiano, que acumula una ganancia de 15.6% en el mismo lapso.
Por su parte, el dólar al menudeo cerró en 17.47 pesos en las ventanillas de los bancos, 1.81% o 31 centavos por arriba del cierre del mes anterior, de acuerdo con datos de CitiBanamex.