De un total de 2.9 millones de jóvenes que concluyeron la Educación Media Superior, sólo un millón reportó cursar el nivel superior, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Inserción Laboral de los Egresados de la Educación Media Superior 2019.
El ejercicio fue llevado a cabo por el Inegi junto con la Secretaría de Educación Pública (SEP) para proporcionar información estadística acerca de los antecedentes educativos de la población de 18 a 20 años que ha concluido sus estudios medios superiores, así como de su inserción laboral.
Los principales motivos por los que los jóvenes no continuaron con su educación superior son la falta de recursos económicos (32.0%), no se quedaron en la institución de su elección o no aprobaron el examen (19.9%), no quisieron seguir estudiando (10%) y hallaron un trabajo o querían trabajar (7.8%).
Mientras que un millón de los estudiantes reportó estar cursando el nivel superior, de los restantes que concluyeron el bachillerato sólo 1.3 millones intentaron seguir sus estudios, sin lograrlo, mientras que 603 mil desistieron de seguir en la escuela.
Experiencia laboral
De la población de 18 a 20 años con bachillerato concluido, 2.3 millones de jóvenes han tenido al menos un trabajo. De ese total, 1.2 millones son hombres y 1.1 millones son mujeres.
Entre los 2.3 millones de jóvenes con experiencia laboral, cerca de 1.7 millones trabajó después de acabar sus estudios, 596 mil ya habían trabajado antes de concluir y 631 mil no tienen experiencia. En comparación con los datos en 2016, hubo un aumento de 219 mil jóvenes que trabajaron tras concluir el bachillerato.
Además, entre los jóvenes que obtuvieron su primera experiencia laboral al acabar sus estudios, 68.2% laboraba en el sector terciario, a 54.3% no les pidieron nivel de estudios, 39.7% tenía una jornada semanal de 35 a 48 horas y 53% tenía un ingreso mensual de más de 3 mil pesos.
De los 596 mil que ya habían trabajado, 438 mil jóvenes lo hicieron en su estancia en la Educación Media Superior y, en su último trabajo, 75.9% se desempeñó en actividades terciarias, 75.7% trabajaba menos de 35 horas a la semana, 51.9% percibía un ingreso de hasta 3 mil pesos y a 62.3% no le solicitaron estudios para ingresar al último trabajo.
De los 631 mil jóvenes que no cuentan con experiencia laboral, 88.2% no ha buscado trabajo y 11.8% sí lo ha hecho. En comparación con 2016, bajo el porcentaje de jóvenes que buscaron trabajo 5.2 puntos respecto a 2019.
Por sexo, se observa que 15.7% de los hombres y 10% de las mujeres han buscado trabajo. Los dos principales motivos por los cuales los jóvenes no buscaron trabajo fue porque estudian y no tienen tiempo (61.6%) y porque su familia no lo permite o no tienen necesidad (19.5%).
A los 2.9 millones de jóvenes con bachillerato concluido se les preguntó por la disponibilidad, nivel y frecuencia de uso de algunas habilidades interpersonales como trabajo en equipo, actitud de servicio, capacidad de negociación, toma de decisiones y tolerancia a la frustración. Más de 90% de los jóvenes consideran que tienen las competencias mencionadas.