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La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Industria Nacional de Autopartes (INA) trabajan con sus contrapartes de Estados Unidos y Canadá para enviar un escrito al Congreso estadounidense relativo a la iniciativa para otorgar subsidios hasta por 12 mil 500 dólares a los autos eléctricos fabricados en la Unión Americana.
En conferencia, Alberto Bustamente, presidente ejecutivo interino de INA, detalló que la iniciativa Build Back Better de la administración del presidente Joe Biden prevé el otorgamiento de 7 mil 500 dólares para la compra de un auto eléctrico, sin importar su lugar de fabricación.
Sin embargo, si el vehículo es ensamblado en alguna planta ubicada en Estados Unidos, la cual está operando con un contrato colectivo de trabajo negociado por algún sindicato, se darán otros 4 mil 500 dólares.
Además, si usa baterías eléctricas con 50% de componentes fabricados en Estados Unidos, se darán otros 500 dólares.
Por lo tanto, algunos vehículos eléctricos fabricados en Estados Unidos podrían alcanzar un subsidio de 12 mil 500 dólares.
“Los dos últimos incentivos son violatorios del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y de las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), al ser discriminatorios y dar preferencia para comprar lo hecho en Estados Unidos”, explicó Bustamante.
La iniciativa de Biden busca que para 2030 que la mitad de los vehículos vendidos en ese país sean 100% eléctricos.
Fausto Cuevas, director general de la AMIA, coincidió en que la iniciativa es discriminatoria de los vehículos fabricados en otros países o fuera de Norteamérica.
“Es una medida con la cual no estamos de acuerdo, y la postura del gobierno mexicano ha sido la adecuada, en el sentido de pensar en posibles represalias”, indicó.
De acuerdo con la AMIA, estos incentivos fiscales no sólo afectarán la exportación de autos eléctricos de México hacia Estados Unidos, sino las futuras inversiones de automotrices como General Motors, la cual tiene planeado destinar mil millones de dólares a su planta de Ramos Arizpe, Coahuila, para fabricar autos eléctricos a partir de 2023.
“De acuerdo con las reglas de la OMC, se pueden fijar aranceles a la importación de productos de Estados Unidos que pudieran tener un valor equivalente a la afectación de la industria en México, pero nos llevaría a una guerra comercial”, apuntó Cuevas.
Tan sólo de enero a noviembre, Ford exportó 60 mil 766 unidades del Mustang Mach-E, el primer vehículo totalmente eléctrico de fabricación mexicana.
El presidente interino de la INA agregó que la industria automotriz hará llegar su postura a la Casa Blanca, así como al Congreso estadounidense, y pedirán que sólo se otorgue un subsidio de 7 mil 500 dólares para la compra de un eléctrico, sin importar el país de origen.