A pesar de que el año pasado el flujo de pasajeros en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México ( AICM ) fue 28% menor a los niveles registrados en 2019, cuando la terminal estaba saturada, las quejas de los usuarios en redes sociales por el retraso de los vuelos son cada vez más recurrentes.
Las causas de las demoras de los vuelos son varias, pero al congestionamiento típico de la temporada vacacional, el mal clima o la falta de tripulación en las aerolíneas se suma el rediseño del espacio aéreo para que entre en operación el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en Santa Lucía ( AIFA ). El ajuste, que se empezó a dar en marzo de 2021, contribuye a los retrasos, aseguran expertos, pues ahora los aviones se separan más y pasan más tiempo en el aire antes de aterrizar en el AICM.
Ángel Domínguez
, piloto y tesorero del Colegio de Pilotos Aviadores de México, comentó que el control de tránsito aéreo en el país está tratando de mejorar en temas de seguridad del rediseño del espacio aéreo y “una buena manera de hacerlo es dando un poquito de mayor distancia en la separación entre los aviones”.
Lee también:
Por reglamentación, se debe guardar una mínima distancia entre las aeronaves dependiendo de cada modelo.
Como ejemplo, la separación entre un Boeing 787 y un Embraer 190 que viene atrás es un poco mayor que si ambos aviones fueran del mismo modelo, explicó Domínguez.
Sin embargo, desde marzo de 2021, cuando inició el cambio de rutas aéreas para preparar la entrada en operación del AIFA, los aviones se están separando aún más en el aire.
“Sí estamos viendo mayor separación, pero también antes vivíamos al límite”, dijo Domínguez. “Antes de la pandemia, el AICM estaba saturado y cada dos minutos despegaba y aterrizaba un avión. Ahora los vemos que están más espaciados y hay menos operaciones”.
Lee también:
Una fuente del AICM confirmó que con el rediseño del espacio aéreo se tienen que separar más las aeronaves y esto ocasiona retrasos en los vuelos.
Además, el aeropuerto no participó en el diseño de las nuevas rutas que integran las operaciones en el AIFA.
Fernando Gómez Suárez
, analista en aeropuertos y aviación, coincidió en que el reordenamiento de rutas hace que los aviones permanezcan más tiempo en el aire, lo que ocasiona que haya un mayor congestionamiento en el Valle de México, así como contaminación ambiental, ya que emiten más CO2 y hay más ruido a niveles superiores a 65 decibeles.
De enero a septiembre de 2021, el AICM reportó que 71.5% de los despegues y aterrizajes se realizaron a tiempo.
De 28.5% que presentó alguna demora, 11% se debió al mal clima, 8% por culpa de un tercero, 7% por causa de las aerolíneas, 1.3% por un evento ocasional y sólo 1.2% por causas no imputables a las aerolíneas, según cifras de la Agencia Federal de Aviación Civil ( AFAC ).
Lee también:
Después del mal clima figuran situaciones como colisiones en el remolque, daño en la carga o descarga, golpes al avión en la plataforma, mantenimiento de las aeronaves, solicitudes del capitán para procedimientos de seguridad, combustible adicional, cambio en el plan de vuelo, la falta de alimentos o abastecimiento tardío de los mismos, falta de personal, llegada tardía de la tripulación de la nave, espera de refacciones, cambio de avión por razones técnicas o entrega tarde de la aeronave, provocan retrasos en el despegue o aterrizaje de un vuelo.
Según cifras de la AFAC, la aerolínea nacional con el mayor porcentaje de operaciones a tiempo es Aeromar, con 79%, y le siguen Aeroméxico, con 75%; Aeroméxico Connect, 72%; Volaris, con 71%; Viva Aerobus, 70%, y Magnicharters, 55%.
Gómez Suárez agregó que las demoras no deberían ser mayores a 10 minutos en cada uno de los vuelos.
“Un 90% de puntualidad es bueno. De ahí para abajo ya impacta en las preferencias del pasajero. Un 30% de impuntualidad es ya crítico”, dijo.
Lee también:
Por su parte, el Colegio de Pilotos Aviadores de México exhortó a los pasajeros a ser más conscientes de que si alguna aerolínea retrasa un vuelo es porque le da prioridad a la seguridad, antes que la puntualidad o la rapidez.
Además, existen temporadas como el invierno, cuando los bancos de niebla ocasionan el cierre de las pistas debido a la falta de visibilidad.