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La Secretaría de Economía, a través de la Dirección General de Normas, dio a conocer el proyecto a través del cual todos los quesos que se comercialicen en México, ya sean de fabricación nacional o extranjera, cuenten con una certificación que demuestre que son hechos de leche y que no incluyan grasas vegetales no permitidas o porcentajes de caseinatos en mayor proporción a lo que permite la normatividad.
En el Diario Oficial de la Federación (DOF) se publicó el Proyecto de procedimiento para la evaluación de la conformidad de la Norma Oficial Mexicana NOM-223-SCFI-Sagarpa-2018, Queso-denominación, especificaciones, información comercial y métodos de prueba, publicada el 31 de enero de 2019, que sustituirá el del 4 de mayo de 2020.
El año pasado el proyecto generó resistencia entre algunos importadores y productores de quesos, quienes pidieron que siguiera la autoevaluación y no se les pidiera certificación de un organismo.
Sin embargo, la dependencia decidió que sí se exigirá el certificado, por lo que a través de dicho procedimiento se pretende demostrar el cumplimiento de la norma de los quesos que se comercializan.
Para ello, el proyecto se somete a consulta entre los diversos sectores interesados, quienes deben certificar los quesos hasta por cuatro años y, una vez comprobado que sí cumplieron la norma mexicana, las empresas puedan pasar a
una autoevaluación.
Con ello, se pretende evitar información que induzca al engaño de los consumidores, como el uso de grasas vegetales o caseinatos que se usan como aditivo para que la leche tenga un mayor rendimiento.