En medio de la crisis por el coronavirus, el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) pidió al fisco ampliar el plazo para presentar la declaración anual de impuestos para las empresas correspondiente a 2019.
Lo anterior, como parte del plan de emergencia económica que presentaron para sortear la eventual recesión y que incluye aumentar el déficit público, que es independiente a las medidas sanitarias para enfrentar el Covid-19, dijo la presidenta del organismo, Diamantina Perales.
Informó que el martes expusieron la propuesta al Servicio de Administración Tributaria (SAT) para darle más tiempo a las empresas y cumplir con su obligación con el fisco, porque en este mes deben presentarlas.
No obstante, muchas sufrirán por el paro de actividades, el cierre temporal de comercios y otras medidas de aislamiento: “Las Pymes serán las más afectadas, ya que no tendrán cómo pagar sueldos por trabajar en casa mínimo un mes ni impuestos”.
Después se evaluará si se da esa facilidad a las personas físicas, cuyo plazo para cumplir es abril.
Los cisnes negros
Perales Flores advirtió que se requieren medidas como éstas para enfrentar los tres “cisnes negros” que surgieron en con los efectos del Covid-19, la guerra de los petroprecios y el estancamiento económico crónico.
Plantearon que se permita la deducibilidad de 100% a las prestaciones sociales a los trabajadores y de los intereses de créditos destinados a la inversión en expansión de la capacidad instalada. Para ello, explicó, se requerirá una política fiscal temporal contracíclica para incrementar el déficit fiscal en 0.5% del PIB, sólo por este año, lo que equivale cerca de 110 mil millones de pesos.
El 100% de este incremento en el presupuesto debe destinarse a medicamentos de emergencia, y el grueso al gasto de inversión pública, condicionó.
Recesión a la vista
El presidente de la comisión de Análisis Económico del IMCP, Ernesto O’Farrill, aseguró que es un hecho que habrá recesión este año por la coincidencia de varios factores como la situación global, la guerra de los petroprecios y el estancamiento económico de México.
De no hacer nada, afirmó, se podrá vivir una recesión profunda. Como mínimo, estimó que se necesitarán 130 mil millones de pesos para la inversión tanto pública como privada y aumentar el déficit fiscal.