En lo que va del año, la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodeon) logró que el fisco y causantes se pusieran de acuerdo para dirimir diferencias sin necesidad de acudir a tribunales, lo que generó una recaudación de 14 mil 560 millones de pesos.
Lo anterior, a través de acuerdos en materia fiscal entre contribuyentes y el Servicio de Administración Tributaria (SAT), con la mediación del ombudsperson fiscal.
De enero a julio de 2021 la Prodecon logró que se firmaran 601 acuerdos de esta naturaleza, que existen legalmente como un procedimiento alternativo mediante el cual se pueden resolver las divergencias entre los pagadores de impuestos y el SAT, como resultado de la acción fiscalizadora
Con ello, la Prodecon aseguró que se logra evitar juicios largos.
Destacó que tan sólo en mayo pasado, con los acuerdos conclusivos, los contribuyentes pagaron al fisco 6 mil 855 millones de pesos, convirtiéndose en el mes con el mayor importe desde que existe esta figura, creada en 2014 como parte de la reforma fiscal.
La procuraduría recordó que, como intermediaria entre las partes en conflicto mediante el acuerdo conclusivo, los contribuyentes cumplen obligaciones bajo el amparo de la defensa de sus derechos, prevaleciendo un pago justo.
¿Cómo funcionan?
Para verificar el cumplimiento de las obligaciones de los pagadores de impuestos, la autoridad fiscal puede iniciar una auditoría o revisión de la contabilidad de personas físicas y empresas.
En caso de que el SAT les haga saber que no está de acuerdo con la forma en que se calcularon sus impuestos, pueden acudir a la Prodecon y solicitar la adopción de un acuerdo conclusivo que permita aclarar las diferencias.
Así, los contribuyentes tienen un medio alternativo de solución de controversias para aclarar de manera definitiva y, sin necesidad de un juicio de por medio, las observaciones realizadas durante la auditoría o revisión fiscal.
Se puede recurrir a esta alternativa cuando se les esté practicando una visita domiciliaria, revisión de gabinete o revisión electrónica a partir del inicio de la auditoría y hasta antes de que la autoridad fiscal les notifique el monto de los impuestos a su cargo.
Entre los beneficios, el contribuyente puede aclarar en un tiempo corto los aspectos de la auditoría o revisión con los que está inconforme. Además, puede obtener la condonación de multas al 100% y se evita estar en juicios largos.
La procuraduría, en su carácter de facilitador, mediador y testigo, busca a través de esta herramienta conciliatoria la creación de acuerdos de voluntad entre las autoridades fiscales y los contribuyentes, para disipar de forma anticipada las controversias y, con ello, evitar la determinación de créditos fiscales cuantiosos.