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Tras el inicio de la ofensiva de Israel contra Irán, el tipo de cambio y los petropercios en los mercados energéticos internacionales, reaccionaron con un alza.
Este jueves, el peso había cerrado la sesión cambiaria con pocos cambios respecto al miércoles, cotizando en 18.91 pesos por dólar, con una depreciación de 0.04%, o 0.6 centavos, según datos de Banco Base.
Tocó un mínimo de 18.85 y un máximo de 18.9 pesos por billete verde en el mercado interbancario.
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Sin embargo, luego del ataque a Irán, la paridad cambiaria de nuevo subió a 19 unidades, destacó la directora de Análisis Económico y Financiero de Base, Gabriela Siller.
Mientras tanto, los precios del petróleo de inmediato respondieron con un incremento que se vio reflejado en un mayor costo de los combustibles en su venta al público en general, sobre todo en Estados Unidos.
En California, los reportes apuntan que por la mañana el galón de gasolina estaba en 4.89 dólares en las estaciones de servicio.
Pero hasta hace unos momentos, subió a 5.20 dólares el galón con casi cuatro litros del combustible de 91 octanos.
Hacia las 02:35 GMT, el barril de WTI norteamericano subía 10.41% a 75.10 dólares, y el de Brent del mar del Norte ganaba 10.15% a 76.40 dólares.
En México el precio de la gasolina Magna, la de mayor consumo, está topado por debajo de los 24 pesos por litro, por lo que seguramente las tensiones en Medio Oriente se manifestarán en la Premium y el diésel.
Desde ayer se intensificaron las tensiones en el Medio Oriente, recordó Banco Base.
Mencionó que se conoció que el miércoles el departamento de Estado de EU se preparaba para ordenar la salida de personal no esencial de la embajada en Irak, ya que se habían estancado las negociaciones nucleares con Irán.
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De igual manera, se autorizó la salida de personal no esencial y familiares de sus embajadas en Baréin y Kuwait, por las crecientes preocupaciones por la seguridad regional, señaló.
Base refirió que las conversaciones entre ambos países no avanzaron después de que el gobierno de Irán exigió mayores garantías sobre la reducción de las sanciones y el descongelamiento de activos en el extranjero.
Frente a ese panorama, se avivó la preocupación por la estabilidad energética regional y el suministro de petróleo, enfatizó Base.
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