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En los primeros 23 días del año, además de gasolinas a Petróleos Mexicanos le siguen robando petróleo crudo, diesel, gas LP y turbosina.
Información de la Dirección Jurídica de Pemex entregada vía la Plataforma Nacional de Transparencia, con fecha del 5 de febrero de 2019, revela en reportes preliminares que el robo de hidrocarburos continúa, aunque logró recuperar producto con un valor por casi 34 millones de pesos en ese periodo.
Aclara que una vez que se cuenta con el dictamen de valuación de daños y la recuperación de hidrocarburos, se observó que el mayor quebranto para la empresa fue en torno de gasolinas y diesel.
De esa cantidad, 32.7 millones de pesos es el quebranto por gasolinas robadas y un millón 216 mil pesos por el diesel sustraído de las ductos de la empresa petrolera.
La mayor recuperación de gasolinas se dio en Veracruz, con 141 mil litros, seguido por Hidalgo, con 45 mil 850 litros; Puebla, con 44 mil 831 litros; Oaxaca, con 31 mil 770 litros; Guanajuato, con 25 mil 500 litros, y Tabasco, con 20 mil litros, además de otros no especificados como Estado de México, Ciudad de México, Michoacán, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Tlaxcala.
Respecto de los volúmenes de diesel recuperado, los estados que tuvieron las mayores incidencias fueron Oaxaca, con 67 mil litros; Veracruz, con 65 mil 997 litros, y Querétaro, con 51 mil 518 litros.
La documentación proporcionada por la petrolera señala que en los primeros días de enero, siete trabajadores o ex trabajadores de Petróleos Mexicanos fueron denunciados por el delito de robo de hidrocarburos, cifra que se suma a los 129 que desde 2006 fueron acusados.
En esos primeros 23 días, la petrolera reportó 442 denuncias presentadas de manera anónima por el delito de robo de hidrocarburos, acusaciones que reflejan igual número de tomas clandestinas, siendo Veracruz el estado en donde se presentó el mayor número de perforaciones ilegales, con 111, seguido por Estado de México, con 97; Puebla, con 69; Tamaulipas, con 37, y Guanajuato, con 33.
Hidalgo, entidad en donde se presentó la explosión del ducto en Tlahuelilpan, apenas reportó 10 denuncias anónimas.
De confirmarse la cifra de tomas clandestinas en enero de este año, habría una diferencia notable con los índices observadas en el mismo mes de 2017 y 2018, cuando las perforaciones ilegales en ductos de Pemex se situaron en 828 y mil 64, respectivamente, aunque debe tomarse en cuenta que varios ductos de la petrolera fueron cerrados a lo largo de los primeros días de este año.
Problema creciente. Pemex asegura que venía de un año récord en el número de tomas clandestinas, pues contabilizaron 14 mil 910 perforaciones ilegales el año pasado, de las cuales el mayor número se registraron en Hidalgo, con 2 mil 111.
Le siguieron las entidades de Puebla, Guanajuato, Jalisco, Veracruz, Estado de México y Tamaulipas.
En estas siete entidades se realizaron en promedio ocho de cada 10 tomas clandestinas reportadas a lo largo y ancho del país durante el año pasado, de acuerdo con las estadísticas que maneja la Gerencia de Estrategia y Sistemas de seguridad y Monitoreo de Pemex.
Sobre el robo de producto, los registros de Pemex, que por primera vez son públicos, muestran que desde 2008 la práctica de sustraer todo tipo de hidrocarburos de los ductos de Pemex era común.
En ese año le robaron a la empresa condensados de campo, petróleo crudo, diesel y gasolinas.
En otros años como 2011, le fueron sustraídos combustóleo, crudo, diesel, gas LP, gasolinas y turbosina.
Dos años después le robaran asfaltos, combustóleo, crudo, diésel, gas natural y gas LP, gasolinas, un producto clasificado como “hidrocarburo” que no se define y turbosina.
En los últimos dos años, el robo se extendió a aceites y toda la gama de productos de fácil comercialización, preferentemente gasolinas, diésel y turbosina.