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Como consecuencia de su labor para dar aviso de operaciones sospechosas en materia antilavado, los notarios del país han sufrido amenazas, secuestros y muertes por parte del crimen organizado.
“Tamaulipas, Guerrero y Michoacán son los estados que se han visto más afectados”, dijo el presidente del Notariado Mexicano, José Antonio Manzanero. Admitió que el crimen organizado los amenaza y a sus familias.
Refirió que tienen que acatar lo que se establece en diversas leyes como la Mercantil y la de Prevención e identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, en las que se señalan los umbrales de inversión en los que están obligados a reportar cuando el capital es mayor a 600 mil pesos.
En materia antilavado, los notarios están considerados como una actividad vulnerable a ser usada para el blanqueo de dinero y tienen que entregar un aviso al SAT, que sirve para que la Unidad de Inteligencia Financiera de la SHCP pueda denunciar.
Detalló que hay cinco actividades vulnerables en las que interviene el notario: transmisión y condición de derechos reales sobre inmuebles, la creación de empresas, poderes irrevocables en materia de actos de admisión y dominio sobre inmuebles, así como en la constitución y modificación de fideicomisos, y otorgamiento de préstamos y créditos.
