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Para las mujeres es más difícil integrarse al mercado laboral, pero es todavía más complicado cuando son madres, limitando sus posibilidades de conseguir un empleo y ascender profesionalmente, señalaron especialistas.
“Tener hijos en la actualidad supone una penalización para las mujeres respecto al mercado laboral. Dichos castigos van desde la falta de acceso a empleos similares a los ocupados por mujeres que no son madres, hasta menores salarios y oportunidades de desarrollo”, comentó Ivonne Vargas, representante LATAM de The Workforce Institute.
Las madres en México tienen una reducción de 4.4 puntos porcentuales en su tasa de participación en la fuerza laboral en comparación con las mujeres sin hijos, agregó la especialista, de acuerdo con estimaciones del instituto, enfocado en investigar y difundir prácticas de recursos humanos a escala mundial.
Además, 8% de las mujeres no pueden volver a trabajar debido a la dificultad que representa el cuidado de los hijos, el doble frente a los hombres, reveló un estudio de ManpowerGroup, empresa internacional especializada en administración de personal.
“Los desafíos del cuidado infantil son una barrera para mujeres que requieren un trabajo, lo que las lleva a enfocar su búsqueda de empleo en ocupaciones en las que puedan tener un mejor balance entre trabajo y vida del hogar”, detalló Martha Barroso, directora de People & Culture LATAM de ManpowerGroup.
El estudio Lo que las mujeres quieren en el trabajo detectó también que 7% de las mujeres no pueden sumarse al mundo del trabajo por ser responsables de las tareas del hogar.
“Mientras no exista una cultura organizacional que tome conciencia y acción sobre la paridad de género y el involucramiento del hombre en tareas del hogar y cuidado de los niños seguirá siendo mal visto”, destacó Barroso.
Por si fuera poco, superar la condición de pobreza en el caso de las madres de familia tiene que ver con el acceso a servicios de cuidado infantil, pues la carencia de ello afecta a los menores por no tener estímulos que impulsen el desarrollo infantil temprano, dijo el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).
De acuerdo con el estudio El desarrollo infantil temprano en México: diagnóstico y propuesta de una estrategia integral para su atención, sólo tres de cada 10 mujeres superan su condición socioeconómica cuando no tienen un servicio de cuidado al infante.
En cambio, cuando sí cuentan con servicios para atender a los pequeños, seis de cada 10 mujeres superan su situación de pobreza, de acuerdo con la Encuesta de Movilidad Social en México.
Otra barrera para la mujer en el mercado laboral es la relacionada con poder amamantar o dar leche a sus hijos en sus lugares de trabajo, agregó Vargas.
Sólo 24% de las empresas en México dan servicios de apoyo a la lactancia materna, que es una prestación de ley, de acuerdo con un estudio de la UNICEF.
“Para las mujeres, actualmente la carga de actividades de ser madres sería equivalente a tener dos trabajos al mismo tiempo, por lo que algunas mujeres sienten que las formas de trabajo actuales son incompatibles con la vida familiar”, señaló Barroso.
De acuerdo con el reporte de Manpower, las madres trabajadoras buscan más flexibilidad en horarios de inicio y finalización; más oportunidades para aprender y mejorar; más flexibilidad para elegir cómo realizar su trabajo; y más estabilidad, es decir, menos miedo a perder su trabajo.
