La llegada de empresas como Tesla y la relocalización de industrias en México es consecuencia de una estabilidad macroeconómica que se ha trabajado en las tres últimas décadas en México, dijo el director general de HSBC, Jorge Arce .
“No nos debería de sorprender que México esté reaccionando tan bien, enfrentando los retos globales que estamos viendo, y que sea el gran beneficiario de lo que está pasando en el mundo por sus tratados de comercio, su banco central independiente, un sistema bancario robusto. Es algo que hemos construido en los últimos 30 años”, dijo.
En entrevista previa a la edición 86 de la Convención Bancaria, a realizarse en Mérida, Yucatán, el 16 y 17 de marzo, dijo que ante el fenómeno de nearshoring que se vive en los estados del norte hay un gran interés de empresas asiáticas y de otras regiones del mundo por aprovechar la relocalización de cadenas productivas, pues el país ofrece las mejores condiciones y apertura a varios mercados para explotar diversas industrias.
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Arce advirtió que el actual nivel de tasas de interés ya empieza a afectar los niveles de pago de algunas familias, que han sido golpeadas por la inflación , además de impactar proyectos de inversión. Sin embargo, recalcó, las expectativas siguen optimistas.
“La inflación es algo que me sigue preocupando y las altas tasas de interés, que ya empiezan a afectar en muchos mercados, al consumidor final e incluso proyectos de inversión en industrias de la construcción y esos negocios”, explicó.
Sin embargo, afirmó que, en general, se percibe a Estados Unidos y a México mucho más resilientes.
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“Es un México muy fuerte y que sigue sorprendiendo a todos. Yo creo que, si vemos las partes básicas de la economía mexicana, no nos debería de sorprender, porque es muy diversificada, tenemos flujos del extranjero en materia de inversión directa, pero también de remesas”, destacó.
“Estamos viendo un gran interés de inversionistas internacionales, no sólo en la parte portafolios que, son muy atractivos, sino también lo estamos viendo en la parte de inversión directa”, detalló.
El director general de HSBC reconoció el buen momento de la banca en México, impulsado en parte por las altas tasas de interés, pero también por una demanda de crédito fuerte, en un mercado con los recursos para financiar proyectos a corto y mediano plazos.
“Un sistema financiero muy sólido, muy robusto, que puede financiar. México tiene un sistema de pensiones que está dispuesto a financiar proyectos de infraestructura, un gobierno con finanzas públicas impecables, que puede apoyar proyectos”, señaló.
Otro punto a favor es que el país tiene la oportunidad de importar productos intermedios y materias primas de todas partes del mundo de una manera muy eficiente, comentó Arce.
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