Más Información

Suman 78 mexicanos detenidos en Alligator Alcatraz; “están en buenas condiciones”, asegura Rutilio Escandón

Policía que mató a joven en Venustiano Carranza es acusado de homicidio; abogados alegan legítima defensa
El simposio anual de Jackson Hole arranca este jueves marcado por las expectativas de los mercados sobre nuevos recortes de tasas de interés en Estados Unidos de aquí a diciembre, pero también por las presiones del gobierno Trump sobre la independencia de la Reserva Federal y su presidente, Jerome Powell, que presentará una revisión del marco de políticas de la entidad.
A falta de casi un mes para que la Fed se vuelva a reunir (lo hará el 16-17 de septiembre) para decidir sobre política monetaria y con las plazas de medio mundo anticipando una medida flexibilizadora en esa próxima junta, el foro y el discurso que Powell pronunciará el viernes en el marco del evento, son el faro que usarán los inversores para medir sus posiciones en las próximas semanas.
“Esperamos que el presidente Powell señale que la Fed tiene la intención de recortar su tipo de interés oficial en 25 puntos básicos en septiembre", explica Vicent Reinhart, economista Jefe de BNY Investments, aunque no son pocos los que creen que la rebaja podría ser mayor.
"Seguimos esperando dos recortes de la Fed en el segundo semestre", apunta por su parte Vincent Chaigneau, responsable de análisis en Generali AM, cuya postura está en línea con aquellos que consideran que la Fed debería rebajar de aquí a fin de año los tipos -actualmente en una horquilla entre el 4.5 y el 4.25 %- en un punto y medio en conjunto.
Sin embargo, tal y como indica el analista de mercados Manuel Pinto, "los últimos datos de inflación nos hacen dudar" sobre la posibilidad de que el Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed apruebe un recorte que supere el cuarto de punto en septiembre.
Se mantiene el objetivo infacionario del 2 %
Los datos de precios de julio -especialmente si se atiende al dato de inflación subyacente, que fue del 3.1 %- apuntan a que la presión sobre el objetivo infacionario del 2 % que defiende la entidad se mantiene.
"Aunque los datos de inflación de julio aún no reflejaban las presiones relacionadas con los aranceles, el aumento (un 0.9 % el mayor desde 2022) de los precios al por mayor en EU la semana pasada indica que los efectos están empezando a filtrarse en la economía", indica por su parte Andrew Jackson, director de inversiones de Vontobel.
Jackson considera que estas muestras de sobrecalentamiento y el efecto de los aranceles -estima que la inflación alcance el 3.5 % el año próximo- llevarán a la Fed a aplicar dos recortes hasta diciembre y a apostar por otros tres en 2026.
En cualquier caso, la subida de precios no es lo único que marca la agenda de la Reserva Federal y el propio simposio de Jackson Hole, ya que el mercado laboral estadounidense ha comenzado a dar muestras de enfriamiento y a colocar en el horizonte la temida posibilidad de la llamada estanflación.

"Las restricciones a la inmigración están limitando la cantidad de mano de obra, los efectos DOGE (siglas del departamento que Trump creó para adelgazar el Gobierno Federal) se están dejando sentir en el empleo público y la incertidumbre política ha inducido a las empresas a adoptar una estrategia de 'poca contratación y pocos despidos'", apunta a este respecto Kevin Thozet, miembro del comité de inversión de Carmignac.
Fed enfrenta un dilema entre el control de los precios e impulsar el empleo
Ante semejante escenario la Fed tiene ante sí un dilema en lo que se refiere al cumplimiento de sus dos funciones primordiales, controlar los precios e impulsar el empleo.
Por eso la revisión del marco de políticas de la Fed que arrancó a final del año pasado con vistas a estar lista en septiembre y de la que hablará Powell el viernes, se antoja de lo más oportuna.
La anterior revisión, de 2020, pone mayor énfasis en la fijación de metas de inflación -el mencionado 2 %- a largo plazo y otorga manga ancha a la definición de su meta de lograr el pleno empleo.
Es por eso que muchos creen que Powell podría anticipar en Jackson Hole un nuevo posicionamiento a medio plazo del organismo que preside que sea más flexible en lo que se refiere a controlar las subidas del IPC y las presiones subyacentes.
Todo esto se produce en un ambiente marcado por las presiones de la Casa Blanca para que la Reserva Federal afloje su política monetaria y se alinee con las medidas más acomodaticias que exige Donald Trump, que ha llegado a decir que el precio del dinero en EU debería estar tres puntos porcentuales por debajo de su actual nivel.
Para sustituir a Powell cuando su mandato en la presidencia expire en mayo el republicano ya ha comenzado a barajar posibles candidatos que se amolden a estas ideas, lo que ha comenzado a plantear dudas sobre la necesaria independencia de la entidad emisora estadounidense.
sg