México fue incluido entre 143 países para los cuales el Fondo Monetario Internacional (FMI) ajustó a la baja su pronóstico de crecimiento económico para este y el siguiente año.
Ayer, al lanzar la última actualización del reporte Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, por sus siglas en inglés), destacó que el Producto Interno Bruto (PIB) del país crecerá sólo 2% en 2022, desde un nivel de 2.8% proyectado en enero pasado.
Lo anterior significa una reducción de 0.8 puntos porcentuales sobre lo estimado a inicios del presente año.
La proyección está en línea con la de analistas consultados por CitiBanamex, quienes también esperan 2% del PIB, mientras que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) prevé 2.3%.
Sin embargo, está lejos de la estimación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), dada a conocer a principios de mes como parte de los Precriterios Generales de Política Económica para 2023, que se planteó en 3.4%.
El FMI explicó que México se verá afectado por el recorte a las expectativas de crecimiento de Estados Unidos y China.
Se estima que el PIB de Estados Unidos se expandirá 3.7%, es decir 0.3 puntos menos de lo previsto antes para 2022.
Para 2023, el organismo multilateral encabezado por Kristalina Georgieva anticipa un avance para la economía mexicana de 2.5%. Comparado con la estimación de enero, que era de 2.7%, significa una reducción de 0.2 puntos porcentuales.
El FMI presentó el WEO titulado La guerra hace retroceder la recuperación mundial, en el arranque de las reuniones de primavera que, en conjunto con el Banco Mundial, lleva a cabo esta semana desde Washington de manera semipresencial.
El economista en jefe del fondo, Pierre-Olivier Gourinchas, explicó que si bien América Latina en general no tiene una conexión directa con Europa, la región se verá más afectada por la inflación y el endurecimiento de la política monetaria.
Desplome de Ucrania
De acuerdo con el reporte del FMI, se prevé que Rusia como Ucrania experimentarán grandes contracciones en su PIB.
Lo anterior hará que la economía global crezca menos en 2022 y 2023, con sólo 3.6% en cada caso, lo que implicará una reducción de 0.8% y 0.2% puntos porcentuales, respectivamente.
Para Ucrania, el pronóstico es de un desplome de 35% de su economía en 2022, dijo el organismo multilateral, y representará un grave colapso como resultado directo de la invasión, destrucción de infraestructura y del éxodo de su gente.
Incluso, el FMI consideró que si la guerra terminara pronto, la pérdida de vidas, destrucción del capital físico y la huida de ciudadanos obstaculizarán la actividad económica en muchos años por venir.
En tanto, la economía rusa entrará en una recesión, con un retroceso de 8.5% este año, es decir 11.3 puntos de diferencia con respecto a enero pasado.
Para 2023 la caída será de 2.3%, que significará 4.4 puntos porcentuales menos a lo proyectado a inicios del presente año.
En Rusia, la fuerte caída refleja el impacto de las sanciones con ruptura de los lazos comerciales, en gran medida por el deterioro de la intermediación financiera interna y pérdida de confianza, explicó. El país es un importante proveedor de petróleo, gas y metales y, junto a Ucrania, de trigo y maíz.
Europa, el Cáucaso y Asia Central, Medio Oriente, el norte de África, y el África subsahariana son las zonas más afectadas, subrayó el FMI.
Además, las alzas de precios de los alimentos y los combustibles perjudicarán hogares de bajos ingresos en todo el mundo, incluso en las Américas y Asia.