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Para contribuir a aumentar el bienestar económico, es necesario que la inflación regrese a los niveles que se tenían en 2016, cuando se encontraba en 3.3%, consideró el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En un documento que entregó al Congreso de la Unión para el proceso presupuestario de 2019, señaló que el mejor desempeño económico y la baja inflación entre 2014 y 2016 mejoraron el ingreso real, pero éste se vio amenazado en 2017 por una tasa de inflación que duplicó la de 2016.
Consideró que, junto con una baja inflación, hay programas sociales prioritarios que deben revisarse y ser integrados al proyecto de presupuesto de 2019 para hacerlos más efectivos y ayudar a incrementar el ingreso de la población más desprotegida.
Del listado del Coneval se identificaron 35 programas que tienen similitud de 100% con uno o más proyectos, así como 23 que tienen similitud de 98% con uno o más planes.
Encontró que las evaluaciones realizadas a programas presupuestarios que han sido fusionados muestran dificultades en la coordinación interna y la integración óptima de las distintas áreas administrativas.
Recomendó que, previo a llevar a cabo una fusión de programas, se integre un diagnóstico que permita identificar la viabilidad de llevar a cabo la propuesta.
Sería oportuno acompañar el análisis de fusiones programáticas con un estudio sobre la estructura operativa de la dependencia, encaminado a buscar que la implementación de las políticas sociales se articule de manera efectiva, que permita la reducción de los cuellos de botella, y con ello incrementar la eficiencia operativa al interior de las dependencias.
Coneval identificó 33 programas que pueden contribuir a incrementar el ingreso para el bienestar económico y planteó aumentar el salario mínimo usando el mecanismo del Monto Independiente de Recuperación propuesto por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos.