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Washington.—El representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, dijo ayer que es posible que se firme un acuerdo en principio sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) “durante agosto”, mes en el que habrá alguna conclusión.
“Probablemente veremos algún tipo de conclusión durante agosto, y mi sensación es que no es tan poco razonable este cronograma si todo el mundo quiere hacerlo”, dijo Ligh- thizer en una audiencia en el Senado de Estados Unidos.
El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, coincidió en el deseo, pero rechazó ser tan categórico en las posibilidades. En declaraciones a periodistas tras una reunión de más de una hora y media con Lighthizer en Washington, dijo que es “muy difícil hacer una declaración de este tipo hasta que tienes soluciones en la mano”.
“¿Es posible? Sí. ¿Estamos comprometidos? Sí. Pero no puedo predecir el resultado final hasta que lleguemos a ello”, explicó. Antes de su reunión, se mostró seguro de la necesidad de que al proceso de negociación se le “apriete un poco la velocidad” para llegar a un acuerdo.
Guajardo Villarreal explicó que el encuentro sirvió para “tratar de avanzar en esta negociación, ideas de ambos lados para seguir adelante”.Analizamos el método, los procesos, los intercambios, los compromisos de los equipos de trabajo sobre temas específicos. Y al mismo tiempo, ver el horizonte de planeación”, añadió.
Sin embargo, hay discrepancias. La primera, de aproximación: Ligh- thizer se mostró muy optimista en el Senado de que habrá un acuerdo con México pronto, y “como resultado de esto [espero] que Canadá pueda venir y comprometerse”.
Guajardo no compartió esa declaración, reiterando la voluntad mexicana de que sea un tratado trilateral: “Tenemos una aproximación diferente, porque muchos de los temas entre mexicanos y canadienses han sido avanzados, y los temas más espinosos en esta discusión son entre Estados Unidos y Canadá, y entre Estados Unidos y México”.
Lighthizer, ante los senadores, insistió que la posición de Estados Unidos es que les va “mucho mejor” con acuerdos bilaterales.
Eso sí: el diálogo se puede hacer de forma bilateral —como ayer entre Estados Unidos y México, o a inicios de semana entre Canadá y México—, que lleve “a trilateral cuando nos acerquemos a la conclusión”.
En la reunión participó Jesús Seade, el hombre designado por el virtual presidente electo Andrés Manuel López Obrador. “Queremos acabar 90 días antes del fin de gobierno [de Peña Nieto], en agosto. Vamos a ver”, dijo. Seade se mostró “cautelosamente optimista”.
El plazo de 90 días es el necesario para que sea la administración actual de Enrique Peña Nieto la que firme el nuevo acuerdo, y que concuerde con el periodo de tres meses de revisión establecido por la legislación estadounidense.
