Los mexicanos optaron por comprar bienes importados sobre lo hecho en México durante la última campaña de promociones y descuentos de El Buen Fin, realizada del 8 al 20 de noviembre del año anterior.
La compra de productos fabricados en el extranjero se disparó 20.4% durante el onceavo mes de 2020 y tuvo su mayor incremento en casi 18 años, desde enero de 2003, cuando aumentó 24.1%.
En cambio, la adquisición de bienes y servicios de origen nacional apenas creció 0.9%, su menor registro desde mayo, cuando disminuyó 1.4% en plena Jornada Nacional de Sana Distancia, de acuerdo con la variación mensual del indicador del consumo privado del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Para analistas de Banorte, el desempeño del consumo en noviembre estuvo explicado por los descuentos de El Buen Fin, evento que, debido a la crisis sanitaria, se extendió por 12 días, cuando anteriormente había tenido una duración de sólo cuatro.
Sin embargo, consideran que las condiciones para la demanda interna se han deteriorado en los últimos meses.
Tras los desplomes que se registraron en abril y mayo por la suspensión de actividades no esenciales, y a pesar de la mejora secuencial en los meses posteriores, el consumo privado total acumula una pérdida de 11.5% entre enero y noviembre de 2020, tratándose del peor retroceso desde que hay información comparable, a partir de 1994.
Analistas de CitiBanamex anticipan que el consumo interno continuará recuperándose en los siguientes meses.
No obstante, consideran que el ritmo será modesto, como resultado de un mercado laboral que sigue en dificultades, una confianza empresarial débil, la falta de apoyos fiscales, así como los efectos de las renovadas restricciones a la actividad en algunas regiones del país.
Inversión crece por segundo mes
El capital productivo en México creció 2.3% en noviembre pasado y ligó dos meses de avances, muestra la variación mensual del indicador de la inversión fija bruta del Inegi.
La mayor recuperación se dio en obras de construcción, particularmente en los recursos canalizados a la vivienda, los cuales se incrementaron 5.4% en el penúltimo mes de 2020, mientras que la inversión no residencial, relacionada con el gasto público en infraestructura, creció 0.4%.
El capital destinado para la importación de maquinaria y equipo se elevó 1.9%, impulsado por el abaratamiento del dólar, al mismo tiempo que la compra de unidades fabricadas en México avanzó 1.6%.
Los flujos de inversión fueron muy lentos a finales de 2020, pues sólo se ha recuperado cerca de la mitad del desplome registrado por el virus y las perspectivas de los próximos meses no son alentadoras, opinó Ricardo Aguilar Abe, analista de Invex.
Desde su punto de vista, además de las limitaciones que provocó el restablecimiento de semáforos rojos en algunas entidades, la inversión no logró despuntar debido a que no han iniciado varios proyectos público-privados que ya se acordaron.
Hace un par de semanas, el CCE anunció que este año comenzarán 30 proyectos en el sector de energía. “Ojalá no queden sólo en acuerdos”, dijo Aguilar.
Destacó que el nuevo gobierno de EU priorizará la inversión en energías limpias, mismas que no parecen serlo para México.