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La escalada comercial entre Estados Unidos y China por la aplicación de aranceles preocupa a Brasil, uno de los grandes exportadores de materias primas y granos al gigante asiático , que podría reducir su demanda masivamente por causa de los entrabes a sus productos. La retórica de guerra comercial instalada entre las dos mayores potencias económicas del planeta, cuyas cadenas de valor son complementarias y se elevan a decenas de miles de millones de dólares ha hecho saltar la alarma en el gigante sudamericano, que vende cantidades ingentes de mineral de hierro, soja y carne a Asia.
En Brasil preocupa que la demanda de mineral de hierro y otros derivados que exporta por miles de millones de dólares a China –donde luego se transforma en productos acabados que vende a medio planeta- pueda caer a corto plazo, influenciando su balanza comercial, que se anota desde hace años superávits.
Por otro lado, Brasil se apresta a superar a Estados Unidos este año como mayor productor de soja del planeta, y preocupa las oscilaciones en el mercado de este y otros granos forrajeros, como el maíz.
La tensión entre Washington y Beijing provocó que el precio de la soja llegará a caer 5.0 por ciento este martes en la bolsa de Chicago, mientras el maíz retrocedía 3.0 por ciento.
Con todo, si China cierra la puerta a la soja estadunidense – compró el año pasado 93 millones de toneladas de Brasil, Estados Unidos y Argentina - por medio de aranceles, los productores sudamericanos podrían beneficiarse del espacio dejado en el mercado asiático.
Analistas estiman que las importaciones chinas de soja estadunidense podrían caer 65 por ciento si Pekín decide aplicar aranceles como represalia al aumento de tarifas por parte de Washington a sus productos.
En un escenario de incertidumbre y de constantes vaivenes en la bolsa de Sao Paulo, Brasil sigue de cerca la escalada Pekín-Washington, mientras la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) estima que una guerra comercial podría provocar una caída del Producto Interior Bruto (PIB) de América Latina de un 1.0 por ciento.
maf