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Tepic, Nayarit.— La tabacalera multinacional Philip Morris Internacional (PMI), dueña de marcas como Marlboro y Delicados, informó que aumentó las exigencias para sus proveedores en México relacionadas con las condiciones laborales que dan a jornaleros agrícolas, que en su mayoría son indígenas y migrantes.
“En un año, 92% de los jornaleros tuvo acceso a alojamiento para ellos y sus familias fuera de las parcelas; 89% de las parcelas contó con áreas de descanso y 94% tuvo acceso a instalaciones sanitarias”, dijo Gonzalo Salafranca, director de asuntos corporativos de Philip Morris México (PMM), sobre los alcances en Nayarit.
Durante un recorrido organizado por PMM en el municipio de Santiago, a menos de dos horas de la capital nayarita, directivos de la compañía y actores de la sociedad civil destacaron que uno de los objetivos es erradicar la explotación laboral en el campo y dimensionar que el problema requiere el esfuerzo de autoridades, empresas y sociedad civil.
“Estamos parando un proceso de explotación laboral y buscamos que la gente esté en mejores condiciones laborales y los niños puedan asistir a la escuela”, mencionó María Josefina Menéndez, directora general de Fundación Mexicana de Apoyo Infantil, instancia que ha trabajado con la tabacalera en la entidad.
Philip Morris emplea a 5 mil jornaleros en Nayarit de forma indirecta, a través de su socio comercial Tabacos del Pacífico Norte (TPN), subsidiaria del conglomerado Universal Leaf Tobacco. PMI compra a TPN más de la mitad del tabaco producido en todo México, según sus propias estadísticas.
Con el tabaco obtenido de Nayarit y en otras regiones del país, Philip Morris México logró en los últimos cinco años duplicar la capacidad productiva de su planta en Zapopan, Jalisco, la fábrica número uno de Latinoamérica.
“Debemos de garantizar las mejores condiciones posibles para los jornaleros agrícolas; todavía falta mucho por hacer y sabemos cómo hacerlo”, expresó Paulina Villegas, gerente de sustentabilidad de PMI.
Al ser cuestionados sobre el impacto de su estrategia a nivel nacional y sobre cómo garantizan que no sólo se trate de mejorar su reputación, Salafranca dijo que PMI tiene acuerdos con empresas auditoras externas a nivel global, como Verité y Control Union, para ser asesorados y evaluar sus programas.
EL UNIVERSAL entrevistó a jornaleros en la zona, quienes comentaron que el precio por sarta, es decir un hilo de un metro con hojas de tabaco, se les paga a 17.5 pesos, por lo que llegan a tener ingresos entre 300 y 400 pesos diarios. En una familia puede llegar a trabajar más de una persona.
PMI dijo que el precio de la sarta registró un incremento de 25% en 2017 en comparación con el precio alcanzado un año antes, y se ha buscado mejorarlo. Para los jornaleros, el precio puede mejorar.
Rodolfo Coronado, presidente de la Asociación Rural de Interés Colectivo (ARIC) Tabacalera en Nayarit, consideró que este cultivo representa la mejor opción de agricultura por contrato en la entidad, tanto por el aseguramiento de la mercancía, el precio de compra y diversos beneficios.