A dos meses que se anunciaran las medidas del Paquete contra la Inflación y la Carestía (Pacic), aumentaron los precios de 17 de los 24 productos de la canasta básica que se incluyeron en el programa, de acuerdo con los datos de inflación publicados por el Inegi.
Entre dichos bienes destacan los casos de la naranja, que de abril a junio pasado reportó un alza de 49.7%; la papa, 44.2%; jitomate, 7.0%; pan de caja, 5.1%; aceites y grasas comestibles, 4.9%; huevo y pollo entero, 4.3%, y chuleta de cerdo, 3.6%.
Los bienes a los que hace referencia el Inegi son más generales que los considerados en la canasta del Pacic, pero dan una idea del comportamiento de los precios de esos alimentos.
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Los precios de productos como la pasta para sopa, papel higiénico, atún y sardinas, jabón de tocador y leche pasteurizada aumentaron en los últimos dos meses más de 2.0%, mientras que la tortilla de maíz y el frijol observaron alzas superiores a 1.0%, y el bistec de res se encareció 0.6%.
Entre los pocos artículos que bajaron sobresalen los casos del limón, con una disminución de 48.3% de abril a junio, en tanto que la cebolla cayó 24.3%. Otros chiles reportaron una baja menor de 2.0%, mientras que el azúcar, la zanahoria y la manzana reportaron reducciones marginales menores a 0.5%.
El Inegi informó que los bienes y servicios cuya alza de precios tienen mayor incidencia en la economía familiar son los alimentos, que reportaron en junio un alza de 13.4% respecto al mismo mes de 2021, mientras que la inflación general llegó a 7.99% anual, su nivel más alto desde enero de 2001.
Alcances y limitaciones
Las principales medidas contra la inflación contenidas en el Pacic, que tienen que ver con el fomento a la producción, son de mediano plazo. Debido a ello, si se trata de evaluar su impacto sobre el alza de los precios en los dos últimos meses, la realidad es que es muy acotado, casi nulo, comentó Luis Adrián Muñiz, subdirector de análisis económico de Vector Casa de Bolsa.
En su opinión, no hay nada que se pueda hacer para contener la inflación de golpe. Para que el nivel general de precios pueda bajar de manera abrupta se tendría que aplicar un control de precios, pero eso es algo que nadie quiere ver, por las distorsiones que pueda generar.
“El alcance del Pacic es muy limitado en términos de frenar las presiones inflacionarias. La única medida efectiva ha sido el subsidio a las gasolinas, pero su costo es muy elevado y se aplicó desde antes del Pacic, por lo que difícilmente se puede hablar de un éxito a la hora de mejorar los niveles de inflación”, advirtió James Salazar, analista económico de CI Banco.
Las medidas para bajar la inflación corresponden a la política monetaria, mientras que el siguiente nivel es mejorar la oferta, pero ese es un problema complejo que lleva mucho más tiempo, agregó.
“Lo que podría ayudar es que la inflación en Estados Unidos baje o que los precios internacionales de algunos insumos disminuyan, como se observa ahora en el caso de algunos metales o productos agrícolas, sin que todavía sea tendencia. Esto tendría mayor beneficio que cualquier medida del gobierno en términos de buscar reprimir la inflación”, advirtió Salazar.
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Lenta disminución
Actualmente se enfrenta una coyuntura en la cual la inflación se va a mantener elevada durante varios meses. Vector Casa de Bolsa estima que durante el tercer trimestre del año será cuando se observe el pico o mayor nivel general de precios, de alrededor de 8.2% promedio.
Tomando en cuenta lo anterior, es probable que la inflación tienda a bajar, pero de manera lenta, por lo que todo 2023 se esperaría que tendiera a llegar a tasa anual de 5%, y no será sino hasta 2024 cuando se podría aspirar a tocar 4%, nivel superior del objetivo del Banco de México.
Con información de Antonio Hernández
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