Sr. Director:
Como le informé vía Twitter a Irene Levy, su artículo titulado ‘La política puede tirar aviones’ contiene una insinuación incorrecta en los hechos relativos al rol y las responsabilidades de la OACI y del Secretario General.
La regulación del transporte aéreo, incluyendo todos los asuntos relacionados con la seguridad operacional y con la implementación de las normas internacionales de aviación civil, es total y exclusivamente la responsabilidad de cada uno de los Estados (países). Legalmente, la OACI no puede y no inicia investigaciones unilaterales en áreas que caen bajo la responsabilidad soberana de los Estados. Esto se explica claramente en nuestro sitio web aquí contenido. Existe información adicional en nuestra sección de preguntas y respuestas, FAQ (tal vez la número 2, “Si mi Estado es negligente respecto de sus responsabilidades en virtud del Convenio de Chicago, ¿puede la OACI amonestarlo o sancionarlo de alguna manera?”), será de utilidad para usted.
Las interpretaciones que usted ha realizado en Twitter respecto a nuestro programa USOAP también son incorrectas y aparentan estar informadas desde las mismas interpretaciones erróneas.
Además de ser engañoso e incorrecto, sus insinuaciones contra la OACI y su Secretario General son potencialmente difamatorias.
Una vez más, le solicito eliminar la frase engañosa sobre la OACI y, en adelante, le solicito que cese la falsa representación de nuestras funciones como entidad que establece las normas.
Atentamente:
William Raillant-Clark
Oficial de Comunicaciones, Oficina del Secretario General de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI)
RESPUESTA DE LA COLUMNISTA
Respecto a su carta, le manifiesto lo siguiente:
1. Únicamente me referiré aquí a lo expresado en mi columna pues mis tweets no son parte de ella y tampoco deberían ser parte de su comunicación a EL UNIVERSAL; ya en Twitter di respuesta oportunamente a sus comentarios ahí vertidos.
2. Me parece muy interesante su referencia a la parte de “negligencia de un Estado respecto de sus responsabilidades” del sitio web de la OACI con relación a lo que sucede en México y que menciono en mi columna. ¿Es esa la visión oficial de la OACI?
3. En mi texto nunca insinúo, como usted afirma, nada contra la OACI ni contra Juan Carlos Salazar, su secretario general.
4. Es gravísimo que desde la OACI se me acuse de cometer actos potencialmente difamatorios. La difamación es todavía considerada un acto criminal en diversos países y es utilizada frecuentemente para silenciar periodistas.
5. Su solicitud de eliminación de una frase de mi columna está fuera de toda proporción y revela un profundo desconocimiento de los principios que rigen al periodismo.
6. Es lamentable que una agencia internacional, que debe respetar y enarbolar los principios de la ONU, agreda a una columnista por su opinión y atente contra la libertad de expresión.
7. Me reservo mi derecho a ejercer las acciones legales conducentes.
Irene Levy