Más Información
Los principales determinantes del menor dinamismo que enfrenta la economía mexicana provienen de la actividad productiva de Estados Unidos, afirmó Alejandro Padilla, director general adjunto de análisis económico y financiero de Banorte.
“Es algo que ya se veía desde finales del año pasado y se extendió hasta la primera mitad de 2024. Hacia adelante vamos a tener un escenario también en el que la dinámica del crecimiento pudiera ser más baja”, dijo en entrevista.
En su opinión, los determinantes de esta baja de la actividad económica vienen principalmente del menor impulso que se percibe en EU, en donde hay datos que muestran una mayor desaceleración, principalmente en las manufacturas.
Lee también: Inmigrantes indocumentados mexicanos en EU piden a AMLO apoyo de Pensión del Bienestar
“Pensando que cerca de 56% de la economía mexicana es altamente dependiente de Estados Unidos es que el grupo financiero pronostica que nuestro país este año estaría creciendo 1.9% y el siguiente 1.5%”, dijo.
Se trata de tasas superiores a las de 1.5% y 1.2%, respectivamente, dadas a conocer esta semana por parte del Banco de México (Banxico).
Otro elemento que va a incidir en la economía mexicana, especialmente en 2025, son los esfuerzos de consolidación fiscal del gobierno federal, con el fin de mantener la prudencia macroeconómica, advirtió Padilla.
“En la parte del consumo privado podríamos ver cierta resiliencia, todavía hay condiciones favorables provenientes de las remesas, el efecto que tienen los programas sociales, mejoras en el mercado laboral e incluso un buen desempeño del crédito al consumo”, dijo.
Lee también: La economía mexicana, ¿estancada?
Padilla explicó que por el lado de la inversión hay dos componentes. El primero tiene que ver con la obra pública, pues una vez iniciada la administración de la presidenta electa Claudia Sheinbaum se conocerán los proyectos que se van a llevar a cabo.
El otro componente tiene que ver con la inversión del sector privado, incluyendo la inversión extranjera directa (IED), “donde vamos a estar viendo el interés por parte de las empresas y los inversionistas por los beneficios que traerá el nearshoring para México”.
En su opinión, México cuenta con condiciones favorables, tiene ventajas competitivas muy importantes y los inversionistas lo ven como un país que va a tener un mayor dinamismo en el sector exportador en los próximos años, especialmente en rubros como el automotriz y la tecnología.
“El principal [determinante para la economía mexicana] es la desaceleración que se está dando en el mundo, principalmente en Estados Unidos, y el otro son las expectativas que pueda haber de inversión del nearshoring”, destacó el directivo de Banorte.
