Ante el inicio de un complicado 2021 por el golpe económico que ha representado la pandemia de Covid-19 en los bolsillos de miles de familias, existen algunas alternativas de crédito inmediato a las cuales se puede acceder para tener efectivo y enfrentar los gastos cotidianos.

La más común es el empeño, práctica arraigada entre los mexicanos y que en los primeros días de enero ha comenzado a registrar mayor afluencia de clientes, tanto en el Nacional Monte de Piedad, como en empresas de préstamo prendario.

De acuerdo con el Monte de Piedad, en 2020 se realizaron 7.4 millones de empeños en sus sucursales distribuidas en todo el país y se prevé que ante la situación actual, en 2021 habrá una mayor actividad con familias que busquen obtener recursos inmediatos para enfrentar los complicados meses que aún se esperan ante la crisis sanitaria.

Si decides empeñar, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros (Condusef) sugiere:

1.- Se debe comparar entre varias instituciones y seleccionar la que cobre menores intereses y comisiones.

2.- Hay que revisar todos los costos involucrados y solicitar que resuelvan todas las dudas acerca de la tasa de interés, las comisiones, el avalúo, los gastos de almacenaje y si cuentan con seguro contra robo, entre otras cosas. Se recomienda que sea el primer filtro para elegir el lugar para empeñar.

3.- Analizar la tasa de interés anualizada. Algunas casas de empeño manejan tasas de interés mensual de hasta 15%, es decir, 180% anual.

4.- Preguntar sobre la demasía, pues tal vez no sea posible recuperar lo empeñado.

5.- Investigar cuál es la cantidad que dará la casa de empeño en este caso. También pregunta sobre cuántas renovaciones del contrato se pueden hacer y cuál es el plazo máximo para recuperar las prendas.

Por su parte, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) recomendó a los usuarios que quieran empeñar que vean más allá del préstamo que recibirán por un objeto.

De acuerdo con el organismo, muchos consumidores únicamente se fijan en la institución que otorga mayor préstamo y no la menor tasa de interés debido a la urgencia de contar con dinero en efectivo.

Explicó que puede haber casos en que dos casas de empeño otorguen el mismo monto de préstamos por un objeto, pero en un lugar se cobra una tasa de 17% y en otra 28%.

Otro de los elementos que sugirió considerar es que si el pago del refrendo o del empeño no se hizo antes de que venciera el plazo y el bien se vendió, puede presentarse el caso de que el bien se comercializó a un precio mayor al préstamo otorgado, por lo que se puede pedir que se entregue la demasía o el remanente.

La Profeco recomendó que antes de empeñar hay que verificar que la casa de empeño no admita artículos robados, revisar el contrato de adhesión registrado ante la procuraduría, conocer los términos y condiciones de la prestación del servicio, el Costo Anual Total, comisiones y tasas de interés.

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