Los precios al público de energéticos como el gas licuado de petróleo (LP) están bajo una presión creciente desde hace algunos meses, pero el conflicto armado en Ucrania puede llevar a que los consumidores paguen todavía más por ese combustible, señalan expertos.
De acuerdo con datos del Inegi, previo al ataque de Rusia, pero ya con tensiones crecientes, el precio del gas doméstico subió 3% en el país y 3.5% en la Ciudad de México en la primera mitad de febrero con relación a la segunda mitad de enero pasado.
Además, datos de la Comisión Reguladora de Energía muestran que el precio promedio nacional del kilogramo de gas LP pasó de 22.72 pesos el 15 de diciembre de 2021, a 23.71 pesos al cierre de la primera quincena del mes pasado.
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Sin embargo, en estados como Baja California Sur y Durango, el precio del kilo llegó a 26.26 pesos y 25.55 pesos al 15 de febrero pasado.
Gonzalo Monroy, analista del sector energético y director de la firma GMEC, señaló que el conflicto entre Ucrania y Rusia está arrastrando al alza los precios de los combustibles.
Explicó que, al igual que en el caso de las gasolinas, el gas LP es altamente sensible al comportamiento del precio del petróleo en el mercado internacional.
Sin embargo, en medio de la incertidumbre sobre el mercado petrolero internacional, dijo que es imposible saber cuánto tiempo se mantendrá la presión sobre las tarifas del gas doméstico, energético que es usado en casi 80% de los hogares del país.
Ni las políticas de contención internas, como el esquema de precios máximos, pueden garantizar que no haya más aumentos, mencionó el experto.
“Esto va a depender de lo que dure el conflicto entre Ucrania y Rusia”, agregó Monroy.
En el bimestre comprendido entre diciembre de 2021 y enero de este año, el precio de la mezcla mexicana de exportación de petróleo tuvo un repunte de 67.60 a 75.70 dólares por barril.
Sin embargo, el crudo mexicano ha seguido la tendencia alcista de sus referentes internacionales, y está cerca de rebasar el nivel de 100 dólares por barril, algo que no se ha visto desde el 27 de junio de 2014, cuando cotizó en 100.80 billetes verdes.
Ayer, Pemex informó que el barril de la mezcla de crudo cerró la jornada en 97.57 dólares.
En tanto, los ojos están puestos en las naciones productoras de petróleo y en qué medida están dispuestas a aliviar las preocupaciones sobre el suministro y controlar los precios al poner fin a sus restricciones de producción, dijo Norbert Rücker, jefe de Economía e Investigación de la división Next Generation del banco suizo Julius Baer.
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Impacto a distribuidores
Representantes de las empresas gaseras que solicitaron no ser identificados señalaron que los precios finales al consumidor están determinados por el mercado internacional.
En situaciones de escalada de precios como la actual, los consumidores culpan a los distribuidores, “por eso evitamos dar nuestro punto de vista, pero hay condiciones que no podemos evitar”, señalaron.
Además, en el caso del gas LP, al igual que en el de las gasolinas, la producción de Petróleos Mexicanos (Pemex) no es suficiente para cubrir la demanda interna, por lo que se debe recurrir a importaciones que responden a los precios globales del crudo.
Pemex produjo en 2021 un promedio de 99 mil barriles diarios de gas LP; el consumo es de 152 mil barriles diarios.
El resto, casi 53 mil barriles, se tienen que importar para cubrir las necesidades del mercado interno, principalmente del mercado de Estados Unidos.
Ayer, el petróleo ligero de Texas terminó en una cotización de 103.41 dólares por barril.