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La Comisión Reguladora de Energía (CRE) prepara un nuevo cambio en el sector, en el que actualizará los permisos de hidrocarburos y los relacionados con generación y suministro eléctrico, lo que tiene inquietos a privados.
El cambio consistirá en que la actualización de los permisos ya no la podrán hacer los jefes de unidades administrativas. Ahora se necesitará la opinión favorable de la mayoría de los comisionados, porque de lo contrario no podrán ajustarse los permisos.
Estas autorizaciones son sobre temas como transporte, almacenamiento, distribución, compresión, licuefacción, descompresión, regasificación, comercialización y expendio de hidrocarburos, petrolíferos o petroquímicos.
También se suman generación de energía eléctrica y suministro eléctrico, ya sea básico, calificado y de último recurso.
La actualización debe hacerse ante un cambio en la estructura corporativa o de capital social del permisionario; cuando haya una alta, baja o modificación de las rutas y destinos de los sistemas de transporte y distribución; un cambio en el monto e inversión de los proyectos; cuando haya un cambio en el monto de inversión de los proyectos; alta o baja de los productos a comercializar, y modificaciones a las marcas comerciales de hidrocarburos y petrolíferos, de las bodegas de distribución, principalmente.
El anteproyecto que envío la CRE a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), el cual está en proceso de consulta, se explicó que la propuesta es que la unidad administrativa analice y evalúe la procedencia para actualizar los permisos.
Previo a la resolución deberá conocer la opinión de los comisionados para saber si están conformes con la actualización del permiso.
Advierte que ese acto administrativo “sólo podrá impugnarse a través del juicio de amparo indirecto, conforme a lo dispuesto por el artículo 27 de la Ley de los Órganos Reguladores Coordinados en Materia Energética”.
Ante esa propuesta, la Conamer empezó a recibir comentarios que cuestionan la decisión.
Uno de ellos se registró el 22 de octubre pasado, el cual reserva el nombre del que lo presentó, y dice lo siguiente: “Se está dejando al arbitrio de cada uno de los comisionados de la CRE la aprobación o negación de la solicitud. Este proyecto cambia abruptamente el procedimiento de actualización, constituyéndose un intento de discriminar a los permisionarios, por lo que genera mayores cargas administrativas”.
En el comentario se cuestiona si será una resolución técnica de la unidad administrativa y pide definir los lineamientos que deberán tener en cuenta los comisionados para decidir si están a favor o no de la actualización del permiso.
