Luego de haber superado la meta de recaudación de impuestos en 2021, el Servicio de Administración Tributaria ( SAT ), anticipó menores ingresos para el presente año.
“Si bien se proyectaba un 2022 con mejores condiciones económicas, los rebrotes de Covid-19 y eventos geopolíticos están afectando las perspectivas de recuperación económica, por lo que existe la posibilidad de un escenario con menores ingresos tributarios de los previstos”, reconoció en el Informe Tributario y de Gestión .
Hizo ver que las distintas olas de la pandemia, han tenido un impacto significativo en la economía de la mayoría de los países en el mundo, en donde el proceso de recuperación económica ha sido más lento de lo previsto.
Por eso, se siguen implementando las medidas de mitigación y combate a la propagación del virus SARS-CoV-2 implementadas por los gobiernos a partir de 2020, señaló.
De esta manera, el SAT ponderó que la recaudación tributaria ha sufrido caídas importantes en los últimos dos años en la mayoría de los países.
Al mismo tiempo, advirtió que se están requiriendo mayores recursos para llevar a cabo los planes de vacunación, la ampliación de los servicios de salud, entre otras inversiones, lo que ha provocado mayor presión en las finanzas públicas.
En este contexto, el SAT señaló que del 2020-2021 en comparación al periodo 2018-2019, la recaudación de impuestos en términos reales en varios países no ha alcanzado los niveles previos a la pandemia, pese a la reapertura de las actividades en el 2021.
Contrabando de combustibles
Por otra parte, el SAT informó que en el caso de México, el año pasado los ingresos captados por medio de los diferentes gravámenes, alcanzaron 3 billones 566 mil 622 millones de pesos.
Lo anterior representó un cumplimiento de 101.0% respecto de la Ley de Ingresos de la Federación, y un crecimiento anual real de 1.1%, es decir, 33.6 mil millones de pesos adicionales a lo programado.
En comparación a 2018, se alcanzó un incremento real de casi 3%, equivalente a 504 mil millones de pesos.
Sin embargo, dio a conocer que entre 2018 y 2021 el contrabando estimado de combustibles se incrementó en un 122.7% al pasar de 45.8 millones de barriles a 102 millones al año.
Mencionó que si bien en el 2020 se observó una disminución temporal del contrabando como consecuencia de la pandemia por Covid-19, sin el efecto de esta, se estima en 89.6 millones de barriles.
Refirió que a partir de 2012 se observó un cambio estructural en el mercado de combustibles, ya que se presentó una disminución en la venta legal de éstos respecto a lo proyectado por el crecimiento económico.
El SAT mencionó que de acuerdo con el Prontuario Estadístico de Petrolíferos 2019 que publica la Secretaría de Energía, la demanda real estimada para 2021 sería de 1.3 millones de barriles diarios; es decir, 477.7 millones de barriles durante todo el periodo.
No obstante, la oferta legítima de combustible, compuesta por la producción Petróleos Mexicanos (Pemex) y las importaciones alcanzó los 375.7 millones de barriles.
Así es como se calculó que el volumen del contrabando fue de hasta 102 millones de barriles para 202, equivalente al 27% de las ventas legítimas de combustibles; y al 41% de las importaciones legítimas de combustibles.
rcr