Más Información
"Agradecemos al señor Nemesio Oseguera"; ayuntamiento de Coalcomán, emanado de MC, agradece al "Mencho" por entrega de juguetes
Sheinbaum se reúne con Lemus; “trabajar al estilo jalisco es en coordinación con la federación”, expresa gobernador
Revés al INE, juez niega retirar suspensión definitiva a reforma judicial; da 48 horas para acatar sentencia
La coquizadora de Tula va a operar a inicios de 2025, dijo el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero Oropeza, en lo que fue un nuevo estimado para estas instalaciones, que van a cumplir 10 años desde el inicio de construcción.
“El primer trimestre de 2025, y lo señalamos aquí por una razón, va a entrar ya en producción completa la coquizadora de Tula, que convierte el combustóleo en gasolinas”, dijo el funcionario en la conferencia del presidente Andrés Manuel López Obrador del 18 de julio pasado.
Cuando se retomó la construcción de estas instalaciones en 2021 se estimó que iba a iniciar operaciones en 2023, pero con el paso del tiempo, al igual que las otras obras de Pemex, las dificultades técnicas y financieras fueron aplazando la fecha de puesta en operación.
Lee también: Pemex ve autosuficiencia al concluir el sexenio
En 2023 se señaló que sería a mediados de este año, luego se aplazó para octubre o diciembre de 2024, y ahora se espera para 2025.
Esta obra está llamada a apoyar el objetivo político de la autosuficiencia energética, es decir, dejar de importar gasolinas, diesel y turbosina de otros países, el cual también se ha aplazado al grado de que el gobierno ha reconocido que no se logrará antes de iniciar la próxima administración.
La obra comenzó a construirse en 2016, pero a raíz de las revelaciones sobre directivos de Odebrecht, de dar sobornos a funcionarios de Pemex para conseguir multimillonarios contratos con la empresa, había sido cancelada.
En la actualidad el costo de esta coquizadora se estima en 60 mil millones de pesos, pero se desconoce cuál es el costo real de las obras ante los retos técnicos que ha tenido.
Lee también: AMLO: Pemex “está en su mejor momento”; se rescató a la empresa, afirma
La planta coquizadora genera más gasolinas y diesel, productos de alto valor del combustóleo, el residuo que resulta del primer proceso de refinación.
En México, por cada barril que entra a las seis refinerías para su procesamiento, entre 30% y 35% resulta en combustóleo, lo que ha restado el margen de ganancia al área de refinación de la petrolera.
Este segmento de negocio lleva 22 años consecutivos reportando pérdidas netas para Pemex y el país.