El consumo privado en el mercado mexicano puede ir perdiendo fuerza en los que resta del año, dada la inflación y las altas tasas de interés, opinaron especialistas.
El analista de banco Base, Jesús López, señaló que en marzo subió la incertidumbre sobre el panorama de crecimiento económico en Estados Unidos y ha aumentado el riesgo de recesión.
Al tomar en cuenta el deterioro del panorama económico, estima que el consumo privado avanzará 1.9% en 2023, lo que, de confirmarse, será el peor desempeño de esta demanda desde 2020, cuando se redujo debido a la pandemia.
El analista de Ve por Más, Iván Huerta, anticipó que, a pesar de ser resiliente a inicios de 2023, el consumo comenzaría a mostrar cierta debilidad en las próximas lecturas debido a que la inflación, a pesar de moderarse, se ha mantenido elevada.
Además, dijo, los mayores costos financieros y la desaceleración económica afectarán a las variables que respaldan el consumo como el empleo, la confianza de las familias, las remesas y la importación de bienes de consumo.