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Los ingresos del sector público son frágiles y no se podrán sostener en el tiempo, porque son producto de acuerdos reparatorios para pagar impuestos atrasados, como el ISR, y porque provienen de fideicomisos de diversos fondos cuyos recursos se los agota el gobierno, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Por ejemplo, el gobierno federal hace uso de recursos no recurrentes, como fue el recuperar los activos del Fondo de Salud para el Bienestar del Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales.
“El saldo disponible en el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP) al cierre de marzo sumó sólo 15 mil 800 millones de pesos, mientras que un año antes contaba con 175 mil millones y, como se señala antes, ya se utilizaron 33 mil millones del Fondo de Salud para el Bienestar y 7 mil 600 millones de la extinción del Fonden”, expuso el organismo del sector privado.
Otra importante fuente de ingresos para el gobierno federal ha sido la mayor recaudación de ISR, producto de la “llamada eficiencia recaudatoria sin judicialización, que serán en su mayoría ingresos de sólo una vez y difícilmente se podrá consolidar como fuente recurrente de recursos”.
Ello porque la mayor parte del repunte se alcanzó por “acuerdos reparatorios” que se hicieron con grandes contribuyentes y que pagaron los créditos fiscales pendientes o en litigio.
“Más aún, si en las negociaciones correspondientes hubo actitudes intimidatorias con amenazas basadas en el arsenal con que ahora cuenta la autoridad, el efecto en la recaudación sería negativo a la larga al disuadir el crecimiento o la creación de negocios”, detalló el CEESP.
Explicó que “a mediano plazo sí se puede anticipar una insuficiencia de los ingresos tributarios respecto a la situación de 2020 y el primer trimestre de 2021.
“Debido a varios factores, como el agotamiento de las fuentes no recurrentes; los límites de la fiscalización y eficiencia recaudatoria, que hasta ahora han aumentado la recaudación con base en casos acumulados que se agotarán paulatinamente, y la probable lentitud del proceso de recuperación” de la economía, entre otras causas.
El centro de estudios informó que, en el reporte trimestral sobre las finanzas y la deuda, las autoridades hacendarias “subrayan la salud de la situación financiera del sector público”, con el fin de generar una “percepción optimista”.
Pero aunque en el primer trimestre del año los recursos públicos superaran en 132 miles de millones de pesos al monto programado para ese periodo, en realidad deben compararse con los ingresos de otros años y revisarse la verdadera causa del incremento.
Porque dicho aumento se relaciona al incremento de 155.3% de los ingresos de Petróleos Mexicanos (Pemex) por el aumento de la cotización del crudo, que subió de 39.16 a 56.34 dólares por barril del primer trimestre de 2020 al mismo periodo de 2021; así como a la mayor recaudación y al uso de dinero de diversos fondos, lo que muestra que son ingresos no recurrentes.