Los ajustes fiscales que se realizaron sobre diversos bienes y servicios tuvieron un efecto sobre la inflación durante la primera quincena de enero, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Durante los primeros 15 días del año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor tuvo un alza de 0.27%, su incremento más alto para un periodo similar desde 2017, con el gasolinazo.
La inflación anual llegó a 3.18%, su mayor nivel en 10 quincenas, mostraron las cifras.
Este comportamiento fue reflejo del efecto en los precios internacionales del petróleo sobre las gasolinas y una mayor alza en la actualización de la cotización de las mercancías, el cual respondió a cambios fiscales, explicó Alejandro Saldaña, analista económico de grupo financiero Ve por Más.
Parte del repunte fue resultado en el ajuste al IEPS de cigarros y gasolina de bajo octanaje, con alzas en sus precios de 7.64% y 0.55%, respectivamente en los primeros 15 días de enero, así como por los aumentos en otros productos como jitomate, con 7.27%; tomate verde, 20.9%; loncherías, fondas, torterías y taquerías, 0.51%; autobús urbano, 2.14%; calabacita, 25.59%; automóviles, 0.90%; tortilla de maíz, 0.89%, y derechos de suministros de agua, 1.54%.
Por el contrario, los bienes y servicios cuya baja de precios contuvo la inflación fueron transporte aéreo, con una reducción quincenal de -28.23%; servicios turísticos en paquete, -9.75%; pollo, -2.34%; gas doméstico LP, -1.69%; nopales, -13.05%; hoteles, -5.65%; paquetes de internet, telefonía y televisión de paga, -1.18%; huevo, -0.99%; papaya, -4.96%, y aguacate, -2.46%.
Por el contrario, los estados con la menor inflación, incluso algunos con variación negativa, fueron Tabasco, con una baja de 0.39%; Yucatán, -0.10%; Tlaxcala, -0.01%; Campeche, con un incremento quincenal de apenas 0.09%, y Baja California Sur, 0.10%.
El índice de precios subyacente, que no incluye los bienes y servicios cuyos precios son más volátiles, registró un aumento de 0.20% quincenal y 3.73% anual, cifra superior a la variación de 3.60% observada en la quincena anterior.
Por componentes, los precios de mercancías crecieron 0.52% quincenal, impulsados por las cotizaciones de alimentos, bebidas y tabaco, las cuales fueron afectadas por una actualización de los impuestos sobre bebidas azucaradas y cigarrillos.
Los precios de los servicios bajaron 0.14% debido a la disminución relacionada con el turismo, que ocurre después del fin de los periodos vacacionales.
El índice de precios no subyacente subió 0.46% quincenal y 1.60% anual. Los productos agropecuarios se incrementaron 0.65% y los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno 0.31%.
En opinión de Saldaña, la aceleración en la inflación vista durante la primera quincena del año puede ser temporal y espera que la variable se mantenga dentro de la meta del Banco de México (Banxico) durante el ejercicio de 3% más-menos un punto porcentual.
Sin embargo, ante la materialización de algunos riesgos al alza para los precios como el incremento del salario mínimo y un alto grado de incertidumbre, el banco central puede reducir la tasa objetivo con cautela y prudencia.
El especialista de Ve por Más anticipa una baja de 25 puntos base en la reunión de febrero.