Debido a que California es el estado de la Unión Americana desde donde más remesas se envían a México, con una tercera parte del total, las redadas en contra de inmigrantes que iniciaron hace días en Los Ángeles, pero que se extienden a otras ciudades, afectarán esos flujos que ayudan a combatir la pobreza.
Sin embargo, eso dependerá del tiempo de las manifestaciones y qué tanto escalen, dijeron especialistas a EL UNIVERSAL. Pero no descartan que los envíos muestren resiliencia, como ocurrió durante la pandemia de Covid-19.
Destacaron que 45% de la población en Los Ángeles, California, se identifica como latina, y entre ella 30% es de origen mexicano.
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Una investigación del Centro de Estudios Monetarios y Latinoamericanos (CEMLA) y de Banorte revela que, del total de las remesas electrónicas enviadas en 2023 desde EU, 34% salía de California.
Es el principal estado de la Unión Americana desde donde llegan dichos flujos, con más de 20 mil 695 millones de dólares hace dos años, según ese reporte.
Datos del Banco de México indican que California es el estado del país vecino con más remesas transferidas al territorio nacional, con 4 mil 415 millones de dólares en el primer trimestre de 2025, más del doble que el segundo lugar, Texas, con mil 997 millones.
Mujeres, clave
Según la investigación del CEMLA y Banorte, las mujeres que enviaron dólares a sus familias en México desde California aportaron 44% de las remesas totales en 2023.
De las transferencias de mujeres, siguieron en importancia las de Texas, con 17.5% del total; Arizona, con 4.7%; Illinois, 4%, y Nueva York-Nueva Jersey, con 3.8%.
El número de envíos de California a México fue de 1.7 millones de operaciones, es decir, 18.3% del total, pero Texas tuvo 2.1 millones de transferencias, con 22.7%, mostraron los datos del CEMLA, la asociación de los bancos centrales en América Latina, cuya sede se encuentra en la Ciudad de México.
Desde California, enviaron remesas sobre todo a Jalisco, con 13.8% del total; Zacatecas, con 10.7%, y Oaxaca, con 8%.
Moritz Cruz, investigador del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, dijo que el gobierno del presidente Donald Trump emprendió acciones en contra de todos los migrantes como parte de sus políticas, lo que generó una respuesta en particular en Los Ángeles, donde hay una elevada proporción de inmigrantes.
“Uno esperaría que hubiera una reducción en el envío de remesas. Lo que causa es que la gente no vaya a trabajar o tenga miedo de ir a sus centros de empleo por miedo a que la deporten”, estimó.
En entrevista con EL UNIVERSAL, explicó que eso provoca que no haya un ingreso y, por lo tanto, podrían destinar menos dinero o interrumpir los envíos a México.
Todo dependerá de si se endurece la política en contra de los paisanos y si persisten las redadas.
Cruz consideró que los hechos actuales pueden compararse con la pandemia de Covid-19, cuando hubo paro de labores por el confinamiento, aunque muchos inmigrantes no dejaron de trabajar.
No obstante, a diferencia de ese periodo, quienes perdieron su empleo recibieron apoyo del gobierno para sobrevivir, lo que influyó en que las remesas siguieran fluyendo. Así, es probable que esta situación sea temporal, dijo, como ocurrió en la pandemia, y conforme se suavice se normalizarán los niveles de los llamados “migradólares”.
El vicepresidente y codirector de Franklin Templeton México, Luis Gonzali, coincidió en que se podría esperar una ralentización de las remesas. “Hay una ralentización; sin embargo, no creo que sea tan disruptivo como para tener un efecto en la cuenta corriente”, dijo.
Refirió que en los últimos años las remesas tuvieron crecimiento, pero con todo el “ruido” actual, su expansión podría moderarse.
Erosión en los hogares
Según sus proyecciones actualizadas hace unos días, el Banco Mundial (BM) prevé que la economía mexicana se estancará ante la mayor incertidumbre global, que afecta las actividades productivas en América Latina y el Caribe (ALC), en particular a través de las exportaciones, la inversión y las remesas.
Sin embargo, para el BM, una erosión en la capacidad de los migrantes para enviar remesas podría tener impactos negativos adicionales en los ingresos de los hogares receptores, en particular en Centroamérica y el Caribe, donde representan alrededor de 20% del PIB.
Banco Base señaló que las entidades más afectadas serían las que tradicionalmente son más pobres y dependientes de dichos ingresos del exterior, como Chiapas, Guerrero, Michoacán y Zacatecas, donde las remesas representan más de 10% del PIB estatal.