La pandemia de Covid-19 trajo consigo retos en todos los ámbitos de la vida humana y las finanzas personales no han quedado exentas, por lo que sería un buen momento de blindar nuestro bolsillo.
Entre los nuevos desafíos que enfrentamos está la inflación, un fenómeno que crea incertidumbre y no permite a las personas realizar una adecuada planeación financiera.
Aunado al aumento de precios, la cuesta de enero —un alza que se da cada año en bienes y servicios— hace que el reto de organizar nuestras finanzas personales luzca imposible.
Dariel Esquivel Díaz, coordinador de Educación Financiera del Museo Interactivo de Economía (Mide), considera que la cuesta de enero debe prepararse desde finales de octubre.
Lo anterior se logra planificando ingresos y gastos en ese mes, pues en el siguiente bimestre (noviembre-diciembre) se reciben el aguinaldo o las prestaciones que “nos permiten tener un poco más de dinero del que regularmente recibimos”, explica.
Sin embargo, el reto es hacer una planeación anual pues, aunque enero ya concluyó, es seguro que la resaca del alza de precios nos afecte unos meses más.
Por eso, el economista egresado de la UNAM sugirió implementar dos acciones. La primera, generar ingresos adicionales “y no nos referimos a buscar un segundo empleo, sino a ofrecer servicios fuera de nuestra ocupación principal o bien realizar una venta de garage”.
La segunda, aminorar los desembolsos, “por ejemplo, reducir los gastos hormiga, lo cual nos permitirá, con ese dinero no empleado, hacer frente a los pagos de los primeros meses del año.
“Una última recomendación general es la de no adquirir más deudas, si es que ya tenemos”, pues generalmente “una de las acciones a realizar es pedir prestado [o empeñar] para pagar los gastos de diciembre, lo que eleva nuestros compromisos de pago”.
Esquivel Díaz ve importante organizar una agenda financiera anual. “Los especialistas en finanzas personales sugieren que a inicios del año podamos tener una planeación del uso del dinero” para los próximos meses.
Lo anterior permite crear un ahorro para tomar vacaciones, realizar alguna fiesta u otro compromiso a lo largo del año, “pero también es muy importante tener un fondo para emergencias, que debemos construir al inicio del año y permite enfrentar contingencias para solventar imprevistos sin endeudarse.
“Tener este fondo nos va a servir como un blindaje a nuestras finanzas personales. Este debería cubrir de tres a seis meses del total de lo que se gasta en ese periodo”. Además, nos permite cubrirnos en caso de perder nuestro empleo, asegura el economista.
El coordinador de Educación Financiera del Mide menciona que otra recomendación ante el escenario de altas tasas de intereses, “nos llevaría a buscar reducir las deudas y no contraer nuevas”.
Por el contrario, recomienda reforzar nuestro blindaje, pues debemos buscar crear “un plan de inversión que nos permita aprovechar estas altas tasas de interés, que se van a seguir elevando a lo largo del año.
“Estas nos van a permitir generar un poco más de dinero vía intereses a través de nuestras inversiones. Entre los productos más recomendados están los Cetes”, manifiesta Dariel Esquivel.
Y es que el coordinador de Educación Financiera del Museo Interactivo de Economía reconoce que se va a enfrentar un año difícil en materia económica.
“Sin ánimos de espantar, de acuerdo con el panorama que plantea el Fondo Monetario Internacional, este año seguiremos arrastrando las consecuencias tanto de la pandemia de Covid-19 como de la guerra en Ucrania.
“Tendremos una reducción de productos, hay escasez de alimentos y otros artículos que impactan en el precio de otros, por eso los precios se han elevado y va a seguir este año, aunque de manera moderada”, señala.
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, y muchas opciones más.