El aumento en servicios, principalmente de los seguros de auto, y educación, así como de algunas hortalizas como el jitomate y la cebolla, hacen que la inflación se resista a bajar de manera sostenida, dijo la subgobernadora del Banco de México (Banxico), Galia Borja Gómez.
Por esa razón, afirmó, la inflación en servicios no tiene todavía un punto de inflexión claro hacia la baja, ya que desde hace un año se encuentra en un nivel por encima del 5%.
“Hemos visto un incremento en los precios de ciertos productos como las hortalizas dentro de frutas y verduras; en educación con las colegiaturas, y en los seguros de automóviles que recientemente han estado muy altos también por afectaciones que tuvieron en la pandemia”, señaló.
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Durante su participación en la Cátedra de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), organizada por la Facultad de Economía de la UNAM, reconoció que la inflación en servicios es la mayor preocupación en Banxico en estos momentos.
Lo anterior, expuso, porque si bien la subyacente alcanzó su pico en noviembre de 2023 con 8.5%, aporta el 75% de la inflación general, y su descenso ha sido más lento.
“Es una de las principales preocupaciones que tenemos ahorita en la junta de gobierno porque las demás ya tienen un comportamiento mucho más favorable.
Pero en servicios, todavía notamos que esa persistencia, es nuestro principal factor de riesgos en el balance hacia delante”, enfatizó.
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Inflación: principal preocupación de la Junta de Gobierno
Ante estudiantes de la carrera de Economía, la subgobernadora mencionó que en la última lectura de abril, la cebolla, el jitomate y el tomate verde, aportaron el 8% de todo el subcomponente de frutas y verduras que tienen un peso muy fuerte en la canasta alimenticia de los mexicanos.
Dijo que es importante monitorearlos, porque si bien los choques se desvanecen rápidamente, y es probable que bajen los precios muy pronto.
Sin embargo, advirtió que lo importante a tomar en cuenta en el Banco Central, es notar que estos incrementos temporales no se traduzcan en efectos de segundo orden en la economía o se empiecen a generalizar.
Galia Borja explicó que detrás de la resistencia a la baja de la inflación, también están los costos de quienes proveen los servicios, como los salarios y el costo de los insumos importados.
“El gobierno federal ha venido impulsando un aumento importante al salario mínimo que más bien era una referencia”, recordó.
Pero desde su punto de vista, consideró que no necesariamente el 100% de estos costos se tienen que trasladar, como ha sucedido en otros episodios inflacionarios.
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