Cada vez más autolavados ofrecen un servicio llamado “descontaminación de rines” , el cual puede sonar a algo muy complejo. Sin embargo, se trata de un tratamiento sencillo y relativamente rápido que dejará buenos resultados estéticos.
Esto se logra mediante el uso de sustancias químicas que actúan al contacto con el hierro y demás residuos de frenos que quedan adheridos a los rines. A diferencia de lavarlos con agua y jabón, este proceso logra una limpieza a profundidad.
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Cómo descontaminar los rines en casa
Hoy en día es posible comprar un spray para descontaminar los rines en el supermercado, tiendas especializadas en venta de productos para auto o en línea. Los hay de diferentes marcas y precios, por lo que aconsejamos leer la etiqueta y aclarar la intensidad del producto así como las superficies con las que trabaja.
La mayoría puede limpiar rines de acero, aluminio, cromados o pintados además de las llantas, pues también se ven afectadas por el fino polvo remanente de las frenadas. Es importante que antes de aplicar el producto, los rines estén totalmente fríos.
El proceso es muy sencillo, ya que basta con rociar bien el producto en todo el rin, especialmente en aquellos rincones difíciles de alcanzar, y esperar a que actúe unos minutos. Esto provocará un c ambio de color a rojo o morado, lo que significa que está desintegrando las partículas ferrosas que provocan la suciedad.
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Los mejores resultados se logran con agua a presión , pero si no cuentas con ello, puedes usar el chorro de la manguera o una cubeta. Para terminar complementar la limpieza, usa un cepillo para rines o trapo de microfibra para retirar la suciedad que quedó sin remover.
Cada cuánto tiempo hacerlo
Dependerá de la cantidad de suciedad que genere tu auto, pero es posible usarlo con frecuencia para evitar que polvo de balata se quede impregnado. Una vez al mes es un lapso de tiempo adecuado para ello, a no ser que la etiqueta del producto comprado especifique algo diferente.