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Hay fallas en el auto que podrían tomarnos desprevenidos, por ejemplo, el sobrecalentamiento del motor. No siempre este problema es previsible, pues sus causas pueden venir incluso de piezas muy pequeñas.
Lo que sí es un hecho, es que el incremento de temperatura en el motor trae consecuencias graves, desde la malformación de sus componentes hasta la pérdida de potencia y la reducción de su vida útil.
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¿Qué provoca el sobrecalentamiento de un motor?
El sobrecalentamiento del motor ocurre por diversos motivos. Es probable que, tras experimentar esta falla, el auto tenga dificultades para arrancar o si va en marcha podría detenerse. En cualquier escenario, lo primero que debes hacer es situar el vehículo en un lugar seguro para reducir su temperatura. Después, realiza una inspección para detectar estas posibles causas:
- Bajo nivel de anticongelante. El anticongelante regula la temperatura del motor. Si el nivel es bajo, el sistema de enfriamiento no podrá trabajar correctamente, lo que produce un sobrecalentamiento. También subyace una fuga en el radiador o en las mangueras, detalla Ford.
- Bomba de agua defectuosa. La bomba de agua es la encargada de hacer circular el refrigerante por el motor. Si la bomba falla, el refrigerante no circula adecuadamente y, en consecuencia, se eleva la temperatura. Este problema puede ocasionar ruidos y fugas cerca de la bomba.
- Radiador obstruido. Con el tiempo, el radiador puede acumular suciedad, lo que bloquea el flujo de aire e impide que el calor se disipe. Es necesario limpiar este componente con regularidad y verificar que el flujo de aire circule libremente.
- Aceite de baja calidad. Además de lubricar, el aceite de motor ayuda a regular la temperatura. Una vez que ha perdido sus propiedades, laz piezas del motor sufren de fricción interna y podrían sobrecalentarse, señala Bardahl.
¿Qué hacer cuando el motor del auto se calienta?
Si el motor del auto se ha sobrecalentado, frena la marcha y espera a que se enfríe. No abras de inmediato el cofre porque podría expulsar vapor o agua caliente. Tampoco trates de echarle agua (al motor o al radiador) porque el cambio de temperatura podría dañar piezas importantes. Después, revisa lo siguiente:
- Nivel de refrigerante: Cuando el motor esté frío, abre el cofre y revisa el nivel del refrigerante en el radiador o en el depósito de expansión. Si está bajo, agrega más líquido conforme la recomendación del fabricante.
- Fugas: Si el nivel de refrigerante se encuentra bajo, identifica si hay fugas en las mangueras, el radiador o las conexiones. Si encuentras una, será necesario repararla antes de volver a ponerlo en marcha.
- Verifica el termostato y la bomba de agua: El termostato regula el flujo del refrigerante y la bomba de agua hace que dicho líquido circule por el motor; cuando ambos fallan, el motor se calienta y lo recomendable es remolcar el vehículo a un taller mecánico.
- Checa el ventilador del radiador: Si el ventilador del radiador no funciona correctamente, el motor no dejará de incrementar su temperatura.
- No conduzcas si el problema persiste: evita forzar el motor para que trabaje porque podrías ocasionar fallas más costosas de reparar.
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