Más Información
Sin importar la época, los autos siempre tienen algunos “enemigos” naturales que los hacen fallar. Uno de ellos es el agua, pues si entra al motor, queda totalmente inservible. Pero esto no fue problema para demostrar la durabilidad de un Volkswagen Sedán , mejor llamado Vocho , hace varios años.
Corría el año de 1968 cuando la agencia de Volkswagen Américas, en Guadalajara , decidió probar qué tan resistente era el famoso Vocho . Las anécdotas que cuentan nuestros papás y abuelos es que aguantaban cualquier tipo de maltrato, pero en aquellos años todavía era un auto relativamente joven.
Para esto, se tomó un Vocho cualquiera hecho en Puebla y se le hicieron modificaciones para convertirlo en un auto anfibio. Los cambios más importantes fueron el sellado de motor y transmisión para evitar que el agua se metiera y provocaran un fallo.
El Lago de Chapala , en Jalisco, tiene una profundidad de 80 kilómetros y una superficie de 1,100 kilómetros cuadrados, lo que representa un viaje similar al de CDMX a Toluca. Pero esto no fue impedimento para que el Vocho lo cruzara, ya que días antes se había anunciado en periódicos locales.
Con semejante hazaña, era natural que la gente acudiera a ver este suceso y el 8 de septiembre de 1968, el Vocho inició su recorrido. El conductor iba acompañado de un buzo y otras embarcaciones en caso de que algo saliera mal y, aunque la intención no era romper un récord, logró “manejarse” por el Lago durante 24 kilómetros en tres horas. Puedes ver el video aquí.
El Vocho fue un auto histórico pero en México siempre fue bien recibido. Su producción local comenzó en 1967 , con 18 mil unidades vendidas. Este histórico Vocho “nadador” fue uno de lo que se hicieron en Puebla y, acabada su aventura en el Lago de Chapala , fue vendido como cualquier otro auto nuevo de la época.
