Si miras casualmente la F1 puede que te hagas la misma pregunta que muchas personas: ¿Por qué casi siempre gana el mismo equipo? La respuesta es sencilla: el dinero. La máxima categoría del automovilismo es un deporte en el que, casi siempre, el equipo con más presupuesto es aquel que se lleva la victoria cada fin de semana.
En ocasiones hay destellos como la victoria de Sergio “Checo” Pérez , pero casi siempre vemos a Mercedes-AMG cruzar la línea de meta en primer lugar y, al final de la tabla, equipos pequeños como HAAS o Williams.
Esto sucede porque el equipo alemán es el que más presupuesto dispone en la F1, y parte importante de esto son la cantidad de patrocinadores que tiene. Es por eso que la mayoría de las escuderías buscan tener respaldo de una buena empresa que inyecte dinero en sus desarrollos a cambio de su logotipo en el monoplaza.
No obstante, no todas las marcas que patrocinan a un equipo en la F1 son lo que parecen. Hay historias curiosas como la empresa completamente falsa que llevó a la quiebra a una escudería hace 15 años o un viejo conocido que tuvo que disfrazar su apariencia para seguir en las pistas.
Aquí te contamos algunos de los casos más interesantes de patrocinadores falsos en la historia de la Fórmula 1.
La mentira de Rich Energy
Nacida como una nueva bebida energética para competir contra Red Bull, Rich Energy presumía un logotipo astas de venado de una forma abstracta. Durante la temporada 2019, esta empresa se convirtió en el patrocinador principal de HAAS F1 Team y la historia comenzaba a pintar bien.
No obstante, se descubrió que la llegada de Rich Energy a HAAS fue solamente porque antes otros dos equipos de la F1 rechazaron la relación comercial con dicha compañía, estos equipos fueron Force India y Williams.
El primero de ellos rechazó la unión con Rich Energy porque la compañía nunca le enseñó un producto final. Por su parte, Williams estaba a nada de cerrar el trato, pero los representantes de Rich Energy no se presentaron a firmar el contrato.
William Storley, CEO de Rich Energy anunció a los pocos días que habían firmado un contrato para ser los patrocinadores principales de HAAS.
A los pocos meses de haber comenzado la temporada 2019 de la F1, usuarios en las redes sociales se cuestionaron la existencia de la bebida energética, ya que nadie había visto o consumido una lata de este producto.
El problema llegó cuando alguien tuvo acceso a los estados de cuenta de Rich Energy, encontrando que solamente tenían poco más de 700 dólares de capital . Esto se hizo público y el 10 de julio de 2019, Rich Energy puso en un tweet que terminarían las relaciones comerciales con HAAS por “un mal desempeño” del equipo en la temporada.
William Storley pensó que se había salido con la suya, pero a los pocos días recibió una demanda de 30,000 dólares por parte de WHYTE Bikes, una empresa que fabrica bicicletas, por haber copiado su logotipo.
El misterioso príncipe de Nigeria
En 1999, la escudería Arrows se encontraba en un bache financiero y buscaban soporte de algunas marcas patrocinadoras para poder desarrollar un nuevo monoplaza y mejorar su equipo de mecánicos; la solución pareció llegar cuando se presentó el príncipe Malik Ado Ibrahim.
Dicho príncipe multimillonario le ofreció al equipo 125 millones de dólares para ser su patrocinador, pero se los entregaría al final de la temporada y, en caso de tener un gran año, había la posibilidad de entregar bonos personales.
El equipo aceptó y compartió el patrocinio principal con Repsol . El nombre de la empresa del príncipe era “T-Minus” y constantemente se podía ver a Malik Ado en el garaje del equipo, platicando con los pilotos y mecánicos.
Constantemente concedía entrevistas en las que promocionaba a T-Minus , pero cuando le preguntaban por el giro de la compañía, el príncipe desviaba el tema para evitar contestar. Esto despertó la curiosidad de los espectadores, quienes encontraron la verdad.
Se suponía que estaba registrada como una empresa de bebidas energizantes, pero se descubrió que también tenían registros de automóviles y motocicletas. El plan era comprar unidades de otras marcas, ponerles su propio logotipo, y venderlas bajo el nombre de T-Minus.
En estos registros incluso habían documentos en los que se planeaban revender Lamborghinis bajo el logo de la marca del príncipe nigeriano.
A pesar de que T-Minus sí vendió por un corto periodo de tiempo una bebida, nunca lograron una ganancia real, por lo que, al final de la temporada 1999 el príncipe Malik desapareció y se escondió durante muchos años para no pagar el dinero que le debía a la escudería.
El equipo jamás se recuperó de este golpe financiero y en 2002 se declararon en bancarrota.
Un viejo conocido con imagen nueva
El monoplaza actual de Ferrari cuenta con un patrocinador de nombre Mission Winnow , mismo que, hasta hace poco tiempo, se desconocía cuál era su principal giro y por qué patrocinaban a uno de los equipos más importantes de la F1.
No obstante, con un poco de investigación a detalle, se rastreó el origen de Mission Winnow a una compañía de nombre Philp Morris International, mismos que son dueños de Marlboro, la gran empresa de cigarros.
Philip Morris había patrocinado por décadas a equipos en la F1 con Marlboro, pero en 2006 la FIA prohibió a los equipos usar logotipos de empresas cigarreras , por lo que Ferrari tuvo que encontrar la manera de mantener a uno de sus principales patrocinadores en su monoplaza.
Entre las múltiples soluciones, se presentó un “código de barras” que aparentemente no era nada. No obstante, a altas velocidades daba la impresión de ser el logotipo de Marlboro , algo que la FIA inmediatamente prohibió.
La única solución para Philip Morris fue crear una empresa de responsabilidad social que, curiosamente, echa mano de un logotipo con proporciones similares a las de Marlboro pero acomodadas de manera diferente.
Solo así se ha logrado mantener a un viejo conocido como patrocinador de Ferrari a pesar de las restricciones de la FIA.
La nueva red social
Durante el Gran Premio de Austria de 2018, aparecieron una serie de anuncios en la pista en los que se promocionaba una marca de nombre “ eyetime ”. Esta marca no tenía registros pasados en el país, pero la CEO de la compañía apareció en la rueda de prensa del GP para aclarar la situación.
De acuerdo a las declaraciones, eyetime era una red social de mensajería similar a Whatsapp , pero no había usuarios registrados o manera de acceder a la misma pues aún se encontraba en fases de pruebas.
No obstante, se descubrió poco tiempo después que en realidad era un “esquema piramidal” con el que la CEO ganó mucho dinero. Cuando el gobierno preguntó por los ingresos de la compañía, estos argumentaron que todo había sido gracias al patrocinio del Gran Premio de ese año y libraron problemas fiscales.
Aparentemente siguen activos y sus actividades son limitadas. Por si fuera poco la fundadora de eyetime creó otras dos compañías similares, Lyoness y MyWorld, que también patrocinaron un par de carreras de la F1 antes de ser prohibidos.