El tema de la movilidad sustentable puede sonar a que es algo que lleva poco tiempo desarrollándose. Lo cierto es que no, sin embargo, sus aplicaciones sí son relativamente jóvenes. Una de estas propuestas recae en el hidrógeno, del cual todavía no tiene la producción ni la popularidad deseada.
Parte de ello tiene que ver con el costo de producción para que el hidrógeno pueda ser usado como combustible en un vehículo. Pero esto no impidió a General Motors a desarrollar un prototipo a base de este gas hace casi 60 años.
El primer auto FCEV
El GM Electrovan fue el primer vehículo FCEV (Fuel Cell Electric Vehicle), con el que General Motors apostaba para desarrollar una movilidad más limpia en el año de 1966. Pero antes de entrar en detalles, vale la pena explicar que un auto de hidrógeno es, en parte un eléctrico.
Gracias al hidrógeno almacenado en los tanques del coche, y mediante un proceso físico-químico es que se descompone en electrones para producir electricidad y así mover al auto. El desecho es agua, por lo que resulta bastante conveniente para el ambiente.
De regreso a GM, la propuesta fue vista con buenos ojos, pues el mundo moderno de ese entonces requería soluciones nuevas de movilidad, que tomó 10 meses en construir. Tomando como base una furgoneta de pasajeros, la marca eliminó todo lo que había detrás de los asientos para albergar los tanques y el complejo sistema eléctrico para lograr moverla.
Una vez que esto logró ser construido, la Electrovan resultó ser un prototipo totalmente funcional, desde el punto de vista mecánico. Tenía una velocidad tope de 112 km/h y podía recorrer casi 200 kilómetros con el tanque lleno de hidrógeno.
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Un rotundo no
Aunque todo sonaba bien, pues la van andaba como cualquier otro auto de la época, el costo de producción de las celdas que transforman el hidrógeno en electricidad era elevadísimo. Si al día de hoy, los autos de hidrógeno son caros (un Toyota Mirai base cuesta $49,500 dólares o $868,937 pesos), poder fabricar el Electrovan en serie resultaría muy caro y prácticamente, nada rentable.
Después de este intento, GM guardó el único prototipo en una bodega en Michigan y, aunque estuvo a punto de ser destruido, terminó en el Petersen Automotive Museum de Los Ángeles.
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Intentos contemporáneos
A pesar de que el GM Electrovan jamás se concretó, el grupo automotor continuó en el desarrollo de esta tecnología con los HydroGen 1, 3 y 4 así como otro vehículos basados en los existentes Opel Zafira o Chevrolet Equinox, pero que jamás llegaron a producción masiva con este combustible.
Al día de hoy, General Motors está más centrado en la electrificación y muestra de ello es el GMC Hummer EV o Cadillac Lyriq, además de los futuros modelos que usarán la plataforma Ultium que puede soportar potencias de hasta 1,000 caballos de fuerza.