Cuando alguien compra un deportivo es natural que quiera usarlo en carreteras o incluso en pista, a altas velocidades. Y aunque la potencia desmedida no lo es todo, las sensaciones de manejo que ofrecen algunos autos son de lo más divertido. Un ejemplo de ello es el Mazda RX-7 , un coupé de los años 90.
Dicho Mazda RX-7 fue descubierto en un garaje después de 23 años de estar guardado. Se trata de un auto modelo 1994 que tenía motor turbo con 236 caballos de fuerza y que, gracias a un video de YouTube del canal WD Detailing , donde se encargan de detallar autos, es que vuelve a cobrar vida.
En el video se relata que el dueño lo compró en 1995 y después de sumarle 14 mil kilómetros al odómetro, decidió guardarlo para -casi- siempre. Seguramente piensas lo mismo que nosotros, ¿por qué alguien haría esto? De hecho, la última vez que el registro para poder usarlo fue actualizado, data de 1999.
El propietario de este Mazda RX-7 llegó a superar la barrera de los 200 km/h pero fue tal la adrenalina, e incluso el miedo, que prefirió no manejarlo nunca más. Con poco más de dos décadas estacionado en su estacionamiento, era de esperarse que tuviera polvo y animales muertos.
Si disfrutas los videos de lavado y detallado automotriz tanto como nosotros, te dará gusto ver que este Mazda RX-7 negro pasa de ser un auto abandonado a uno que, literalmente, parece salido de la fábrica. Pero aún quedan cosas por hacer, pues después de tanto tiempo parado, es necesaria una visita al taller para que pueda volver a manejarse.