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Si hay algo que caracteriza a Mazda es que durante muchos años usó el motor rotativo desde 1967, pero que en tiempos modernos se llegó a usar en el RX-8, un deportivo que dejó de producirse en 2012.
Los motores rotativos, también llamados Wankel, tienen un diseño muy diferente al clásico diseño en línea, pues tiene una pieza triangular que funciona como cilindro. Los motores rotativos se caracterizan por su pequeño tamaño pero gran generación de potencia.
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El regreso del motor Wankel
Mazda es una marca que le gusta hacer las cosas diferentes, por ello es que revive el motor rotativo que dejó de usarse en 2012 con el RX-8. Sin embargo, el regreso de este tipo de motor tiene una filosofía diferente.
Será usado en el Mazda MX-30, un pequeño crossover que, hasta el momento, se había vendido como eléctrico en Europa, Japón y Estados Unidos. Este modelo también cuenta con puertas traseras suicidas, es decir, que abren de manera opuesta a las tradicionales, tal como el RX-8.
Ahora, también recurre al motor Wankel en la versión e-Skyactiv R-EV, que es una variante híbrida enchufable, que además de recibir energía eléctrica directa de un enchufe, la adición del motor rotativo servirá para cargar las baterías. Su tamaño es de 0.8 litros y está disponible en Reino Unido.
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Es un concepto similar al e-Power de Nissan, solamente que con la adición del puerto de carga para baterías. Esto significa que el motor Wankel no impulsa las ruedas, sino que sirve para generar electricidad. Dicho esto, en total promete 600 kilómetros de rango y 85 de ellos serán sin que el motor de combustión se active.
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