¿Quién ocupa las cinco primeras posiciones de los 300 más ricos de Suiza? ¿Qué fortunas sorprendentes se entremezclan con empresarios poderosos? La lista que la revista Bilanz publica cada año desde 1989 no deja opción a la indiferencia.
Dos tercios de los 50 primeros lugares son extranjeros con ciudadanía suiza y los sectores que más aparecen son la inversión inmobiliaria (una quinta parte del total), farmacéutico, bancario o de bienes de consumo.
El top 300 de este año sigue encabezado por la familia sueca Kamprad, dueña del imperio de muebles Ikea, con una riqueza estimada en 45 mil 500 millones de francos suizos (CHF). Le sigue el brasileño Jorge Lemann, propietario de parte de la cervecera más grande del mundo, Anheuser-Busch InBev, con 27 mil 500 millones. El tercer puesto es de las familias Hoffmann y Oeri, descendientes de los fundadores del gigante farmacéutico Roche, con 23 mil 500 millones.
El primer relojero aparece hasta el puesto 24 y es Johann Rupert, accionista mayoritario de Grupo Richemont.
Uno de los millonarios más conocidos es el tenista helvético Roger Federer, embajador de Rolex, con una fortuna de 425 millones en el lugar 206. Pero el índice de acaudalados incluye a personajes no suizos de fama planetaria: Tina Turner, Norman Foster, Santiago Calatrava, Paulo Coelho, Bernie Ecclestone, Karim Aga Khan, Michael Schumacher, Sebastian Vettel o Kimi Räikkönen, entre otros.
El nuevo ranking de Bilanz concluye que solo 25 súper ricos redujeron su riqueza. Otros 68 la aumentaron. En general, los activos de los 300 suman 613 mil 475 millones de CHF, que suponen un 3.1% o 18.6 millones más que en 2015.
La industria relojera representa solo 5.6% de estos ricos con 17 familias ligadas al sector, aunque para varias su negocio principal es la joyería y otras ya no están activas en el sector.
La revista dice que uno de cada 18 de los 2 mil 473 multimillonarios del mundo vive en Suiza. Y que para entrar en los diez primeros nombres de su lista se requiere tener al menos 10 mil millones de CHF.
