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El fabricante chino de teléfonos inteligentes Xiaomi presentó el miércoles una unidad central de procesamiento propia, sumándose así al selecto club de empresas de telecomunicaciones capaces de concebir y producir sus propios chips.
Con "Surge S1", Xiaomi, que habla de "proeza" tecnológica, iguala al estadounidense Apple, el surcoreano Samsung y el chino Huawei, únicos fabricantes de teléfonos móviles que producen sus propias unidades de procesamiento.
"La capacidad de hacerlo es el resultado más prestigioso al que puede aspirar un fabricante de teléfonos inteligentes", declaró Lein Jun, director general y cofundador de Xiaomi.
El teléfono "Mi 5C", presentado al mismo tiempo, será el primer aparato telefónico del grupo equipado con "Surge S1".
Cuenta con una compacta pantalla de 5,15 pulgadas, tiene un grosor de 7.09 milímetros, y un peso de 132 gramos. Cuenta con una batería de 2.860mAh, equipada con un sistema de carga rápida (9V/2A).
Hasta ahora, Xiaomi equipaba sus teléfonos exclusivamente con unidades centrales fabricadas por el estadounidense Qualcomm y el taiwanés MediaTek.
"China está en la vanguardia en la tecnología de unidades centrales de procesamiento por lo cual el anuncio de Xiaomi es estratégicamente muy importante", dijo a la AFP Sun Changxu, analista del sector.
